Arriba a Cádiz "El Esmeralda". Doble cita con la memoria. Vicente Sarasa

Mi abogado Gonzalo Boyé, que es chileno, me informó hace varios días de la llegada mañana martes 15 de septiembre del buque escuela “Esmeralda” de la armada chilena. Y lo hizo indignado con cómo se estaba dando la noticia en la prensa local. (Ver “La Voz digital” del 10/09/2015). Normal su indignación.

Este buque fue centro de torturas y de secuestros durante la dictadura de Pinochet que acabó con la experiencia de la Unidad Popular que llevó al gobierno a Allende, él mismo asesinado. Gonzalo sabe bien de aquello, pues fue militante del MIR (Movimiento de la Izquierda Revolucionaria) y represaliado político. Y muchos de sus compañeros sufrieron las “maravillas” de este “embajador de la muerte” más que “embajadora del mar”, como lo denomina ese periódico digital gaditano antes mencionado.

En realidad, a Cádiz ha venido en varias ocasiones. Y también en varias supo dársele la bienvenida que se merecía. Que se merece. Ya en 1977 el País informaba que "El buque-escuela chileno ‘Esmeralda’ arribó ayer a San Fernando para reparar averías. Cuando (…) realizaba la maniobra de atraque, los trabajadores de la Empresa Nacional Bazán lo abuchearon y han decidido oponerse a repararlo”.

Por eso, cuando Gonzalo Boyé me hablaba del escándalo que suponía la recepción que se le preparaba mañana en nuestra ciudad -ya que pisoteaba la memoria de los muertos, desaparecidos y torturados embarcados forzosamente allí (y que las autoridades chilenas no quieren reconocer como se debe)- cuando me comentaba eso, digo, yo le contesté que no sólo debemos rescatar la memoria de esos compañeros y compañeras sacrificados allí, sino que tenemos pendiente rescatar otra memoria. Esta vez más nuestra. La de la gente de Cádiz, la de sus trabajadores, la de lo mejor de su clase obrera, que con su boicot al Esmeralda mostraron un alto sentido de solidaridad internacionalista.

Mañana en Cádiz hay, pues, una doble cita con la memoria. Que no lo olvidemos. Y que nadie se escude en protocolo alguno. Decía Silvio que “hay muertos que alumbran el camino”. A veces toca alumbrar a esos muertos que pretenden asesinar de nuevo para no perderlo. Nuestro camino.

 
 
 

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15-09-2015 El 'Esmeralda' ha llegado al puerto de Cádiz y en él permanecerá hasta el 19 de septiembre. [+]



 
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 Tal como reflejaba la declaración de Red Roja sacada entonces (*), por nuestra parte se ha sabido ganar un espacio propio dentro de las Marchas desde donde proyectar una influencia en su seno. Pero si entonces hubo que superar esquemas dogmáticos y sectarios (del tipo “aquello no era suficientemente proletario”) y nacionalistas (“la crisis es España y en Madrid no se me ha perdido nada”), hoy hay que poner un mayor acento en que el fortalecimiento de las posiciones revolucionarias –tanto al interior del 22M como en la relación de este con el exterior- pasa por distinguirnos mucho más nítidamente de los planteamientos reformistas y fuertemente electoralistas que siembran de impotencia y desamparo la “indignación popular contra la crisis”.

 

Vicente Sarasa. 

La lucha de clases se agudiza en Venezuela. De nuevo la Historia retoma la forma de tragedia de la que Marx hablara y expulsa todo intento de escribirla en clave de comedia. A la burguesía, “ni un tantico así”: diría el Che. Mientras el imperialismo domine las relaciones económicas, internacionales, militares, mediáticas, la democracia burguesa sólo puede ser democracia dejando de ser... burguesa; y los burgueses acompañen a los feudales en el museo de la historia de la explotación y la opresión.

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