Cientos de aficionados del Rayo acudieron al estadio vestidos de naranja (como los presos de Guantanamo) en señal de resistencia

Y pancarta en solidaridad con los enfermos de Hepatitis C.

Volvemos a la carga tras el éxito de la reivindicación naranja contra Tebas en el último partido en Vallekas, el que disputamos ante el Deportivo de la Coruña. Y lo hacemos dándole una nueva vuelta de tuerca a la protesta, con un cortejo previo al encuentro desde la boca de Metro de Buenos Aires hasta el Estadio. De la misma forma que los presos de Guantanamo enfilan el corredor de la muerte, los rayistas acudiremos juntos hacia nuestras gradas sabedores de que al cruzar los tornos de acceso nuestros derechos quedarán en la calle. Por ello, y al igual que hace quince días, volvemos a hacer un llamamiento a todo el rayismo para que acuda vestido de naranja, el color de la resistencia, haciendo visible así nuestro rechazo a las injustas medidas que llevamos sufriendo varios meses.

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