Las limpiadoras de los colegios públicos llevarán a juicio a Limasa para la modificación de los contratos en fraude de ley
CÁDIZDIRECTO / Rafa Burgal.-
Las
representantes de las trabajadoras de limpieza de los colegios públicos
de Cádiz y la concesionaria Limasa no han llegado esta mañana a un
acuerdo en el Sercla para la modifiación de los contratos que se
encuentran en fraude de ley. De esta manera, la
plantilla llevará a juicio a la empresa para el reconocimiento de ocho
puestos de trabajo fijos tras haber obtenido anteriormente una
resolución favorable de la Inspección de Trabajo.
La denuncia realizada por parte del comité de empresa se debe a que la empresa cubría estas plazas con personal eventual o de sustitución de varios meses.
Tras elevarse la queja a la Inspección, ésta decretó en el mes de
noviembre que los contratos se encontraban en fraude de ley. En el
encuentro de esta mañana, la oferta de la empresa ha sido hacer fijos cinco de esos puestos, propuesta que no ha sido aceptada.
La presidenta del comité de empresa, María Luisa Valle, explicó que la empresa concesionaria “tenía sitios vacíos y la empresa hacía contratos de uno o tres meses por sustitución”. Valle denunció que esta situación se sigue reproduciendo “en empleadas que llevan ya unos seis o siete años trabajando”.
Este conflicto se une al que se mantiene abierto para el cumplimiento
del nuevo pliego de condiciones para la limpieza de los colegios
públicos. Para ello, la empresa ha comunicado al comité que la semana que viene se celebrará una reunión entre las partes para negociar la aplicación del nuevo contrato.
Valle argumentó que “el pliego establece que son 1.925 horas,
mientras que Limasa quería que fueran 1.600 horas. El Ayuntamiento le
ha obligado a cumplir el contrato”.
Ante esto, la plantilla se mantiene a la espera de realizar nuevas
protestas ante la ejecución del nuevo contrato. Valle comentó al
respecto que “la consigna es que nadie se mueva” hasta que no se produzca el encuentro con Limasa, aunque la convocatoria de protestas sigue en pie.
Así, el objetivo de la representante de las limpiadoras es que
“se respete el pliego de condiciones. Del anterior a éste saldrían
cinco compañeras, que rotarían haciendo las sustituciones y las harían
fijas discontinuas”.
Si no hubiera acuerdo con Limasa, las trabajadoras volverían de nuevo
a la lucha después de un verano intenso de movilizaciones para evitar
despidos entre las limpiadoras de los colegios públicos.
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