Por la Salida de la Unión Europea, el Euro y la OTAN (III)

El Euro.

“Aún cuando uno se reconozca comunista, o socialista, o peronista, o cualquier otra ideología política en determinado país, solamente caben dos posiciones en la historia: o se está a favor de los monopolios o se está en contra de los monopolios.”
Mensaje a los argentinos el 25 de mayo de 1962. Ernesto Ché Guevara.

La solución a los problemas llamémoslos “económicos” que sufre la clase trabajadora de los pueblos del Estado español, pasa no sólo por la salida del Euro, sino por la salida de la Unión Europea, la OTAN y sobretodo, por la salida de un sistema económico basado en la explotación de la clase obrera y en la extorsión social de otros sectores populares a manos de la clase capitalista. Ésta, cada vez con mayor virulencia, despliega su ola reaccionaria sobre los trabajadores y trabajadoras reprimiendo sus luchas, así como criminalizando e ilegalizando a sus organizaciones.
Este sistema está hoy día absolutamente globalizado. La acumulación y la renta imperialista operan a escala mundial. El valor es valor mundializado. Sus actores de la clase burguesa forman un compacto bloque hegemonizado por las potencias imperialistas, con francamente pocas desviaciones respecto a la tendencia dominante. Esto no quiere decir que no haya fisuras, desórdenes, asimetrías, desarrollos desiguales, contrastes entre centro y periferias, distintos accesos y formas de accesos a los recursos dominados por el capital, y que se reproduzcan distintas formas de explotación e incluso a muy pequeña escala, distintos modos de producción de clase conectados al mercado mundial capitalista. Lo que queda claro es que, por ejemplo, en las estrategias antiimperialistas, hoy día es difícil encontrar aliados de otras clases sociales que no sean la clase obrera, la clase campesina y otros sectores populares, omo antaño lo fuera cierta burguesía nacional, por aquel entonces en pugna con otras burguesías que se estaban conformando en centros imperialistas de poder. Y, lo que está aún más claro, es que hoy la clase obrera y trabajadora en términos absolutos y relativos, es mayor que nunca en la historia.
Con el grado de concentración y centralización adquirido por la expansión del capitalismo, su desarrollo, la elevada interpenetración de capitales y su acumulación bajo la dirección del capital financiero, la oligarquía capitalista local no es en modo alguno lacaya o servil a una oligarquía internacional sino, que forma parte de la misma.
La dimensión de la concentración y centralización de capitales es tal, que a través de distintos mecanismos, hasta en el sector financiero hoy el BBVA, por ejemplo, tiene un 52,3% de su accionariado en el extranjero y Bankia un 19,3%.
La mayoría del accionariado de Repsol está en manos de capital extranjero. En el 2009 la eléctrica italiana ENEL se hizo con el 92,06% de las acciones de ENDESA. El sector inmobiliario hoy devaluado –en rebajas y con ofertas especiales- también está siendo sobrevolado por bancos y fondos más o menos buitres, los cuales esperan hacer lucrativos negocios. Incluso a este paraje lleno de casas sin gente y gente sin casas, en búsqueda de oportunidades de negocios han llegado últimamente Bill Gates y George Soros.
Seis de las diez empresas más grandes de la industria alimentaria pertenecen a capital extranjero (Nestlé, Danone, Campofrío, Unilever, Panrico…). Aguas de Barcelona está participada en el 75% por la francesa Suez Environnement. De la telaraña capitalista de propietarios en los medios de comunicación tan sólo podemos decir que marea, y que deja bien claro la profunda conexión de capitales.
“… los principales dueños de la Bolsa española son ya las gestoras de fondos de inversión, que controlan más del 12% del mercado bursátil. Destacan entre ellas la norteamericana Blackrock (Telefónica, Iberdrola, Repsol, BBVA, Santander, Inditex), el banco noruego Norges (prácticamente en las mismas empresas que Blackrock más Abengoa), la francesa Lixor, del Société Générale, la estadounidense The Vanguard, el francés Amundi, etc”.
Fuente: La economía semicolonial y el imperialismo español.José Manuel Rodríguez Acevedo.

A esas otras clases sociales en proceso de proletarización, con las que quizá se pueda contar, no queda más que plantearles que o se suman a la lucha antimonopolista encabezada por la clase obrera o desaparecerán. Los monopolios generalizados se nutren también de la expropiación de los capitalistas y las condiciones objetivas para una amplia alianza social antimonopolista, están dadas en este sentido.
La crisis estructural del capitalismo, las desigualdades y su crecimiento sin freno, no nacen con la aparición de la moneda única, sino que nos han acompaño antes de que existiese la UE y mientras exista la UE, que tiende a exacerbar las desigualdades y antagonismos de clase, pues hunde sus raíces en el capitalismo.
Salir del euro como primer paso necesario, entonces no debe ocultar el problema de fondo a tratar, pues no es tanto un problema de moneda sino un problema de sistema. El problema que con el sistema capitalista tienen los trabajadores desde tiempo inmemorial. Un sistema donde la producción social, bajo la forma predominante de esclavitud asalariada, privadamente se la adueñan quienes detentan la propiedad sobre los factores objetivos de la estructura económica, y el poder sobre el aparato del Estado y sobre otra clase social: la clase trabajadora.
Tras el derrumbe de las barreras aduaneras dentro del marco de los países miembros de la Unión Europea, como era de esperar, se impuso como necesidad estratégica, el desarrollo de una moneda de cambio para facilitar la circulación de capitales bajo la directriz del capital monopolista, con el objetivo de evitar interferencias de distintas facciones nacionales de la clase burguesa en el poder en la acumulación capitalista.
La adopción de la moneda única por parte de los distintos Estados de la UE, responde a la lógica acumulativa del capital monopolista, que es el director principal del proceso político y económico del capitalismo europeo tras la Segunda Guerra Mundial. El diseño de la moneda única, es uno de los últimos escalones de este proceso. Tras la unión política de los Estados y la unión económica de las formaciones nacionales, a la espera de la unión bancaria, energética y de seguridad, está implícita la determinación del actor que ha de controlar la política monetaria. Ese actor ya no son los respectivos bancos centrales de los Estados miembros, sino una instancia que las supera completamente (BCE) y que ha sido diseñada con la orientación específica de su gran patrocinador y máximo beneficiario: el capital Alemán.
El Euro es una moneda creada y administrada de forma unilateral por el capital monopolista, y el estatuto del Banco Central Europeo así lo prevé. A pesar de la importancia que tiene el Euro en el funcionamiento del sistema capitalista de los monopolios generalizados y de ser una herramienta fundamental en la estrategia del capital monopolista, el Euro no crea las relaciones sociales de producción capitalista, leyes económicas del sistema y los aparatos estatales fundamentales de clase dominante que no residan ya, previamente, en el sistema capitalista.
Evidentemente, salir del Euro como primer paso supone que a renglón seguido, en una estrategia de salir del sistema, se ha de crear de una moneda propia. No tanto una moneda nueva propia del Estado español, y por tanto, de la clase capitalista dominante, sino propia de los trabajadores. Que éstos seamos sus propietarios. La emisión de tal moneda y su control, dependerá de instancias bancarias controladas por los trabajadores, y por tanto conllevaría asumir el control de la política monetaria y de la evolución económica de nuestros pueblos atendiendo a nuestras necesidades económicas y sociales en un escenario mundial. Si bien éste está dominado por los poderes imperialistas en bloque, presenta grietas, espacios de cooperación, pues el poder de la triada imperialista en ningún caso es omnímodo. Y por ahí podremos desenvolvernos internacionalmente en la medida de nuestras necesidades, buscando aliados o socios comerciales necesarios para satisfacer las necesidades del pueblo trabajador y poner tierra de por medio ante los parásitos, prestamistas y usureros.
La salida del Euro y la creación de una nueva moneda, sea en manos del poder de los capitalistas españoles dentro del mercado mundial o en manos de los pueblos del Estado español dentro del mercado mundial, supone directamente sufrir los efectos más negativos de una devaluación. A ello, en el segundo caso, se le uniría el bloqueo y cerco político y económico del imperialismo. Pero peor es seguir cavando nuestra propia tumba. Esto sucederá, pero de lo que se trata es de ir más allá.
El proyecto de salida de la Unión Europea y del Euro bajo las directrices de la banca privada y las empresas privadas, supone que la soberanía de la política monetaria y con ella el control del proceso de producción, cambio y distribución, seguiría estando en manos de la burguesía. No habría más que una soberanía económica de la misma clase. Y la salida que ésta nos ofrecería, sería la devaluación monetaria para competir en el mercado mundial. Durante un pequeño espacio de tiempo se abriría la ventana por medio de exportaciones más competitivas, o simplemente más baratas con las que intentar abrir hueco -por medio de exportaciones que no necesiten de importaciones previas- y así intentar desplazar a la competencia capitalista, explotándonos a los trabajadores más aún si cabe, pues en el mercado mundial capitalista no operan más reglas que la producción de ganancia por empleo de más medios de producción por unidad de mano de obra, o pagarnos menos a cambio de un mayor trabajo. A este respecto señalar que no deberíamos querer ser tan productivos como el capitalismo desea. De hecho ya somos sobradamente productivos. Con más de 6 millones de parados, el trabajo a tiempo parcial para jornadas completas y todas las formas posibles de precariedad laboral extendidas, seguimos produciendo una riqueza capitalista de magnitudes colosales, que apenas retrocede en magnitud y que tan solo sirve para reproducir un único escenario: una sociedad de patronos y de trabajadores, de burgueses y proletarios, de explotadores y explotados.

Evolución del PIB en España

Fecha
PIB Mill. €
 Valor Absoluto de Paro 
 
(EPA)
20131.022.9885.935.600
20121.029.0026.021.000
20111.046.3275.287.300
20101.045.6204.702.200
20091.046.8944.335.00
¿Otras salidas posibles a esta situación? Alguien podría declararse enamorado de la UE y del Euro. Plantearle entonces, con mucha educación y cariño al capitalismo monopolista, que deponga las armas y desista de querer seguir ganando mayores cuotas y masas de beneficio a través de la explotación de los trabajadores, y que –por favor- devalúe el Euro, aunque se encarezcan el coste de sus importaciones (sobre todo energía y materias primas), y por lo menos se debilite el valor de sus exportaciones (sobre todo industriales y bancarias) para que crezcan en número y permitan aumentar ingresos. Y entonces los capitalistas que parten el bacalao, reunidos en la sala destinada a tal efecto -media hora antes que lo haga la troika- dirán “amén” y se reirán a carcajadas. ¿Subirle además los impuestos a los “ricos”? ¿Quitarles los privilegios que le otorga su Estado? ¿Quitarles el paraguas de la evasión de impuestos, del fraude fiscal, de la economía sumergida y las leyes laborales -estas sí que muy legales- que permiten explotarnos más y más? Pues ante la reacción que desencadenaría en ellos tal medida, como la reacción que históricamente han tenido ante la posibilidad de una reforma agraria por ejemplo…, para eso ¿por qué no mejor dedicar los esfuerzos a elevar la conciencia de clase de los trabajadores, a organizarnos y orientar a las masas obreras hacia la toma del poder y ejercicio del poder obrero construyendo una alternativa revolucionaria que nos saque de este escenario horripilante y nos deje a quienes somos la mayoría, y además creadores de la riqueza social, dirigir nuestro destino sobre la base de la democracia popular y el poder obrero?
Con una moneda alternativa las importaciones serían más caras por la variación del tipo de cambio y se reduciría el poder adquisitivo de los salarios ante la subida de precios, se produciría una mayor fuga de capitales, el mercado financiero internacional de la triada imperialista (capitales financieros europeos, estadounidenses y japoneses fundamentalmente) cerrarían sus puertas a los capitales españoles y la deuda externa se elevaría. Las deudas nominadas en euros -fundamentalmente del Estado y de la banca privada- contraídas con acreedores extranjeros –la banca internacional y el capital transnacional- crecerían, y los bancos que ya han evitado su bancarrota haciéndonos pagar sus ruinosos negocios, intentarían hacer crecer nuestras deudas internas subiendo los tipos de interés para hacernos pagar sus deudas privadas externas que ya a día de hoy son impagables en tiempo, en forma y en todo. A este respecto decir que a finales de 2012, el total de la deuda acumulada por la economía española suponía el 435% del PIB, casi 4,5 billones de euros. El 104,2%, algo más de un billón de euros, era deuda pública. Y a pesar que la parte destinada a gasto público (en sanidad, educación, prestaciones sociales) ha sido reducida por la oligarquía y la plutocracia drásticamente, la deuda pública sigue inflándose por la caída de los ingresos del Estado, los intereses de la deuda y por el rescate a los bancos con cargo a las arcas públicas y en última instancia a los lomos de los trabajadores por medio de despidos, bajadas salariales y recortes en derechos sociales y laborales. El origen de incremento descomunal de la deuda pública ha sido la banca y la beneficiaria en todo este proceso también ha sido la banca. El resto de la deuda corresponde a la deuda de los hogares 70% (718.487 millones de euros), de la que más del 75% se corresponde con deuda por préstamos para hipotecas, y sobre todo, la mayor parte de la deuda corresponde a la deuda privada de empresas no financieras (en menor grado) y de empresas financieras (en bastante mayor grado), que son responsables de una deuda acumulada del 261% del PIB.
Gráfico 9
Gráfico 10
Gráfico 11
Más que miedo a un futuro cuyas reglas sean las de la democracia política y económica así como la justicia social y el poder obrero con la mira puesta en la en emancipación de clase trabajadora y la liberación de las cadenas que nos impone el capitalismo, deberíamos tener miedo a este presente real, gobernado y administrado por el capital monopolista y cuya opción de futuro para la clase obrera y otros sectores populares es más explotación, más pobreza, más miseria, más injusticia, más guerras, más podredumbre, más mierda.
La consigna lanzada por los esteticienes del capital, con la intentan meternos miedo, es que nos aferremos a la UE, confiemos en el Euro, demos mi salves a la OTAN y rememos sin parar ni protestar por el bien común de la economía –en realidad, de los intereses de los capitalistas-. Si salimos de la Unión Europea volveremos a la edad de piedra, nos dicen. Nos cortarán la luz y tendremos que iluminarlos con candiles otra vez. Además nos comeremos los unos a los otros. Nos cortarán la línea ADSL. Cuando nos hayamos devorado los unos a los otros la dieta mediterránea de rigor será a base de pan y agua. Y el mundo entero nos aplastará bajo su bota como a una cucaracha y se reirá de nosotros. Y eso lo dicen quienes precisamente nos aplastan y se ríen de nosotros, nos cortan la luz, no explotan a más no poder, nos empobrecen, nos imponen mil deberes y nos privan de cualquier derecho.
En este sentido, más que preocuparnos por las consecuencias apocalípticas que según los tarotistas y charlatanes integrados del sistema tendría salir del Euro -o que nos echaran-, deberíamos preocuparnos por la devaluación salarial realmente existente, por la destrucción de fuerzas productivas que el capitalismo está llevando a cabo y por los alarmantes niveles de explotación, pobreza, miseria, desigualdades e injusticia que hoy sufrimos y que seguiremos sufriendo si no oponemos resistencia y lucha revolucionaria. O se ponen en cuestión los monopolios y la propiedad privada o estamos perdidos.
La dependencia de la economía capitalista española respecto al mercado mundial capitalista -donde el valor es valor mundializado- es la misma perteneciendo a la Zona Euro que no perteneciendo a la misma. La salida de la Unión Europea, del Euro y de la OTAN o es un proyecto de clase obrero y popular, habiéndose asegurado dotarse de fuerzas suficientes y capaces de controlar los sectores económicos estratégicos, o no será. Es decir, o será socialista y comunista o no será.
De ahí que sea absolutamente necesaria la suspensión del pago de la deuda y la expropiación y nacionalización de la banca y los sectores estratégicos de la economía (industria, energía, agua, latifundios, turismo, telecomunicaciones, transporte público y comercio), para asentar las bases o condiciones de su socialización.
A lo largo de estos artículos centrados en la necesidad de golpear todos a una, con una estrategia en beneficio de los trabajadores y no de los patrones, y que pasa necesariamente por la salida del Euro, la Unión Europea y la OTAN hemos utilizado dos conceptos explicativos de la base que sustenta la alianza interestatal imperialista europea del régimen de los monopolios generalizados. No terminaremos esta serie de artículos de opinión sin por lo menos intentar explicar estos conceptos.
El primero de ellos es la concentración de capital y el segundo la centralización de capital.
La concentración de capital es un fenómeno que está provocado por la propiedad privada de las condiciones de materiales de producción, la caótica y desenfrenada producción capitalista y el desarrollo desigual de distintos capitales por los cuales gracias a la productividad del trabajo tras cada ciclo de valorización de capital cada uno de los capitales se convierte en un centro de concentración, en la medida por tanto en que reúne en grado creciente los medios para su propia valorización. En otras palabras: es el crecimiento del volumen de capital por medio de la acumulación de plusvalía y su capitalización. Es el capital en tanto capital: capital que se valoriza. El proceso de valorización se basa en la explotación de la fuerza de trabajo haciéndola trabajar por encima de sus necesidades de reproducción y con el objeto de producir una ganancia de la que la clase capitalista se apropia al ser propietario de las condiciones materiales del trabajo y de la parte de la producción excedente del mismo. Y los otros fundamentos en se basa esa explotación son 1) la obtención de mayor proporción de ganancia (trabajo excedente, plusvalia) sobre la base de una menor remuneración (trabajo necesario, salario) y 2) el ahorro capitalista del trabajo vivo en el proceso de producción.
Sobre la base de la explotación de los obreros y por su tendencia a producir con menores costes por medio de la mayor y mejor explotación y prescindiendo de los trabajadores al máximo posible, tiene lugar un cambio en la composición técnica de los medios de producción, que eleva la cantidad en valor del capital necesario para dirigir la producción. La concentración se deriva por tanto de la acumulación capitalista, e implica la modificación técnica y de valor de la composición de capital.
La centralización de capital es un fenómeno histórico general derivado de la acumulación capitalista. Se basa en el proceso de desvalorización del capital sobre el fraccionamiento de los capitales. Es el crecimiento del volumen del capital por la fusión de varios capitales en uno, por la absorción de unos capitales por otros o por una ampliación de capital con lo en definitiva se trata de una concentración de la riqueza social cada vez en menos manos y en grado creciente. Tiene un aspecto globalizador y tiene lugar precisamente en el momento en que la tasa de extracción de plusvalor declina y genera crisis de ganancias para los capitalistas, que suele llevar a cabo destrucciones masivas de capital. La centralización se efectúa sobre la eliminación de empresas, de capitales, y por el crecimiento de otros. La destrucción de capital disminuye la masa total de capital empleado en la producción y proporciona nuevas oportunidades de valorización a todos los demás. Una de las características de la centralización de capital es la imposición tras ese escenario de unas nuevas relaciones de competencia entre capitalistas. Implica la organización del capital centralizado a través de diversas formas económicas y políticas y la creación de una vasta red de subcontratación. Los capitales subordinados en esta red de subcontratación, a pesar de su régimen jurídico como capitales individuales no operan independientemente desde el punto de vista de la valorización sino integrados en el capital concentrado y dependientes del mismo. Esta es la base de los monopolios y de los monopsonios. Los ejemplos de Mercadona, Carrefour o Wallmart –hay otros- ilustran el monopsonio de manera clara. Walmart, por ejemplo, es una de las corporaciones más grandes del mundo, que desde Estados Unidos opera internacionalmente y ha conseguido erigirse en monopolio de la distribución y se impone como cliente único para otros. Con su poder de monopolio y condición de único cliente (monopsonio) para muchos productores capitalistas está en condición de regular las cantidades de producción, los precios de producción y de venta.

La leyenda del lobo herbívoro.

Hay quienes en estos momentos críticos y cítricos –pues nos exprimen como a limones- se aferran a la idea de “salir de crisis” mediante un incremento de las exportaciones sobre el supuesto de una devaluación del euro. Esta estrategia que parte del presupuesto de aumentar la competitividad de las exportaciones para ganar terreno frente a otros. Supone actuar sobre una devaluación de los factores de producción (materias primas y fuerza de trabajo), fundamentalmente -esto ya debemos conocerlo todos- devaluando la fuerza de trabajo (devaluación interna y concentrada) o actuar a través de la política monetaria mediante una devaluación de la moneda (devaluación externa general). En efecto, como alternativa a la devaluación de salarios que es la que está teniendo lugar, una devaluación monetaria durante un tiempo permite en determinadas circunstancias aumentar las exportaciones (o algunas exportaciones) de los países en que opera la moneda devaluada. Esto por lo menos ha sido así en otros tiempos donde la economía mundial presentaba más diferencias y más cauces de participación y además donde el valor aún no era valor mundializado. En el contexto actual la economía española participa de un engranaje imperialista que se nutre de nuestra explotación a manos de los capitalistas y de una sobreexplotación de los obreros del resto del mundo de los que el gran capital obtiene mercancías baratas prácticamente en cualquier lugar del mundo dada sus condición de monopolistas-imperialistas y las actuales infraestructuras comercio y transporte mundial. A su vez el capitalismo sufre de sobrecapacidad combinada con una bajísima remuneración del trabajo tendente a igualarse a la baja mundialmente.
No se pretende a través de estas líneas explicar a fondo el escenario económico en que nos inscribimos. Más bien se trata de plasmar unas líneas generales para acercarnos al conocimiento de la realidad desde la que se parte y situarlas como premisas para el análisis de las posiciones políticas de quienes sostienen la idea de “salir de la crisis” sin salir del capitalismo a través de las exportaciones por ejemplo. La capacidad que estas tengan de ayudar a aumentar los ingresos –y luego supuesta (y falsamente) mejoren la distribución de ingresos sobre la sociedad en su conjunto- es más que limitada. Está sujeta a un entorno que hoy día es el mundo capitalista, la cadena del valor mundializada, el régimen de los monopolios imperialistas, que además esta caracterizado por un detraimiento de los intercambios comerciales y una competencia brutal basada en una igualación de salarios a la baja debido a la crisis de rentabilidad y la sobrecapacidad productiva del capital. A pesar de ello, si es que ello puede dejar de pesar, hoy por hoy y desde hace bastantes años los ingresos por las exportaciones españolas están siempre por debajo de los gastos por las importaciones y eso se refleja claramente en una balanza comercial negativa. Se exporta poco y barato y se importa mucho y caro. En el último año confirmando la tónica habitual, propia de la inserción subordinada del capitalismo español en el imperialismo europeo a través de las condiciones de las que se partía para la adhesión y la moneda europea, el 77% de las importaciones fueron destinadas a la inversión o producción y sólo el 23% que son las de menor valor añadido lo fueron al consumo.
Quienes sostienen la idea de superar la crisis buscando por ejemplo superar el déficit comercial a través de la rama industrial con inversión en I+D y demás, ¿tienen en cuenta las circunstancias reales de la economía capitalista mundializada y del imperialismo? ¿Qué incidencia tendrá sobre la base del tratado de Libre Comercio entre la UE y USA? ¿Tienen en cuenta que ya previamente parte de estas ramas a reinventar han sido destruidas por el capital monopolista asignándonos un nuevo papel en la división social del trabajo a nivel internacional? Es un nuevo resurgir del mito del desarrollo industrial con aumento salarial y ampliación de la cobertura de derechos. La industria que es, o pueda ser, seguirá siendo en las condiciones actuales sumamente dependiente de las importaciones relacionadas con esta rama, se enfrentará a una competencia capitalista, no regional sino mundial, que es brutal. ¿Han caído en la cuenta de que aún el supuesto de una devaluación monetaria disminuya el déficit comercial a través de una mejora de las exportaciones existe una persistente cuenta energética creciente y de materias primas por la dependencia económica del exterior que hará francamente difícil ahorrar en todos los factores de la producción?
En tanto la clase de los capitalistas sean propietarios de los medios de producción, distribución y cambio, intentar salir de la crisis con estrategias puramente económicas, dentro de los mecanismos globales de valorización imperialistas, supone utilizar las reglas del capital: explotación, más explotación. Las estrategias basadas en una lucha meramente económica choca con los límites infranqueables del sistema económico en que se inscriben. Sólo la lucha de clase de los trabajadores que caracterize el conflicto no solamente como algo económico sino como algo político, como la lucha entre las clases antagonistas, podrá plantear alternativas que realmente sean alternativas.
Con la adopción de la moneda única los Estados miembros de la Zona Euro cedieron la política monetaria y cambiara al BCE. En consecuencia el BCE se reservaba la posibilidad fijar los tipos de interés, emitir moneda, devaluar, etc.
Si la economía española genera ingresos por debajo de su deuda una solución para el burgués de turno efectivamente puede ser conseguir más ingresos del exterior a través de las exportaciones o bien ganando cuota de mercado o bien obteniendo mayores beneficios por las mismas. Devaluar la moneda supondría empujar las exportaciones afuera de la UE. Hoy por hoy, la mayoría de las exportaciones van destinadas a la UE, la mayoría de los socios comerciales de la economía española son miembros de la UE. En los últimos años los grandes capitales españoles han intentado salir de este entorno y buscar nuevos espacios de acumulación en el mercado exterior y éste representa ya en torno al 35% del total de las exportaciones.1 La devaluación monetaria en un primer momento no tendría efecto sobre las exportaciones con destino la a la Zona Euro ya que compartimos moneda. La devaluación tendría efectos de mejora sobre las exportaciones que tengan por destino compradores de los países que no son de la Zona Euro y que tienen una moneda más cara.
Habría que preguntarse ¿qué hay que hacer para ser competitivos en esos otros mercados? Las condiciones de competitividad en el mercado mundial están sujetas a la acumulación capitalista desigual, al régimen de los monopolios imperialistas derivados de la concentración y elevada centralización de capital y a la producción basada especialmente en salarios medios bajos, bajos o más bajos que nuestros bajos salarios.
Las bienes mercantiles que más exporta la economía española y tiene una influencia directa sobre el empleo son principalmente vehículos de motor y componentes, derivados del petróleo, frutas, hortalizas, legumbres, carne, pesca, textil, medicamentos, aparatos eléctricos, plásticos. Por sectores es la industria de bienes de equipo la que representa la mayor parte (20,7%) de las ventas exportadas. Pero siguen siendo predominantemente de tecnología baja-media.
Una rama del sector industrial que supone un importante grueso de las exportaciones desde hace algunas décadas, pero cuyo peso sigue siendo relativo, es el sector del automóvil con el 14,3%. Desde hace bastante tiempo este sector a tenido una gran importancia en la economía en España, que por sus características geoestratégicas y sociopolíticas se convirtió gracias a su mano de obra más barata y disciplinada en la fábrica de las grandes matrices de la industria del automóvil, como en otros lugares con similares características lo son y han sido Corea del sur, Sudáfrica, Brasil. En el año 2012 la producción automovilística se elevaba a 1.979.179 unidades de las que 1.729.172 (87,4%) tenían por destino la exportación. En el año 2013 la producción de automóviles se elevó a 2.163.338 unidades de los que 1.879.974 (86,9%) fueron destinados a la exportación. En el año 2014 se prevé la producción de 2,4 millones de unidades y las exportaciones tendrán por objeto en torno a 120 países, siendo los mayoritarios los del espacio de la UE. En EEUU se prevé multiplicar las exportaciones por 5 respecto a 2013, hasta llegar a las 100.000 unidades. Así mismo se prevé aumentar las exportaciones en los países del norte de África. La balanza comercial en este sector es positiva. ¿Con una devaluación del Euro mejoraría la capacidad productora y exportadora de este sector que precisamente esta sobrecapacitado y es esencialmente exportador? Si así fuera ¿sería suficiente?
La balanza comercial en la industria aeronáutica y espacial es beneficiaria 4.120,3 millones de euros exportados frente a importaciones por valor de 2.452,7 millones. Señalar que la mayoría de la industria aeronáutica en España –a través de Airbus- está ligada a la industria militar. Y respecto otra parte de la industria de la guerra las exportación de armas españolas durante los últimos 6 años se han multiplicado casi por diez con lo en 2013 que participan del PIB con 3.907,9 millones de euros. Sus principales clientes los podemos encontrar en el golfo pérsico.
En el año 2014 se produjeron avances en las exportaciones de la industria química de los medicamentos. Él sector de la industria química general de gran importancia estratégica pero de modesta relevancia económica para la economía española presenta una balanza comercial negativa y seguirá siéndolo aún con las previsiones de crecimiento de hasta un 3,5% en 2014. Es un sector fuertemente condicionado por los precios de las materias primas y la competencia mundial.
Otro sector que tiene relevancia en las exportaciones españolas son las del sector agroalimentarios. En 2013 representaban el 16,2% (38.000 millones de euros) del total exportado. La UE también ha sido el destino para las mayorías de ellas (76,22%). A pesar de que este sector la balanza comercial es positiva desde el punto de vista de aumentar su capacidad de ingresos hay un obstáculo difícil de superar debido a la elevada competencia mundial este sector.
Las cifras de negocio que ofrece la industria española (bienes de consumo, bienes de equipo, industria extractiva, química, energética) no logran compensar su enorme dependencia de la industria de fuera. Y no está en condiciones de hacer cambiar esta realidad a menos que aumente su competitividad de una forma extraordinaria, a saber: generalizando condiciones laborales por debajo del nivel de subsistencia dado el desarrollo de fuerzas productivas actual.
Tras estos breves apuntes vayamos a la idea de quienes plantear debilitar el Euro como estrategia para “salir de la crisis”. La devaluación del Euro tendría por efecto un aumento de las exportaciones, pero no de todas las exportaciones y por supuesto no de todos los países de la Zona Euro por igual. La economía española en principio cuyas exportaciones son reducidas sí que tendría algunas opciones de mejora de sus exportaciones con lo cual reducir su déficit comercial y la posibilidad de obtener mayores ingresos. ¿Pero por cuánto hay que multiplicar las distintas exportaciones y durante cuánto tiempo para que este programa de alivio de la carga comercial y financiera en un plazo medio de tiempo sea suficiente? ¿Cómo se distribuirían esos ingresos? O dicho de otra manera, ¿qué gana la clase obrera y demás sectores populares con ello? ¿Sería el capital alemán que es el patrón mayor del barco mercante europeo, que hoy por hoy, es la mayor potencia exportadora de Europa en condiciones de un Euro fuerte…, sería beneficiada por la devaluación monetaria o sería la gran damnificada? Alemania, potencia exportadora, ¿encontraría con una devaluación un problema de encarecimiento de importaciones que son necesarias para su industria como energía y minerales que son materias primas fundamentales de este sector?2 ¿Qué responde actualmente el capital alemán por su propia boca y la de sus representantes? Qué ellos no pagan los platos rotos ni los suyos ni los de otros, qué lo page clase trabajadora matándose a trabajar ganando poco que para eso está.
Otro efecto que tendría la devaluación es que los tipos de interés subirían con lo cual la financiación de la economía capitalista en el mercado interbancario mundial sería más costosa precisamente para los grandes capitales, que son quienes precisamente se desenvuelven en dicho espacio económico.

Lo que el Euro se llevó.

La primera impronta que dejó el euro en nuestras retinas –y bolsillos- desde su entrada en vigor es que a pesar de que 1 euro se cambiaba en razón de 166,386 pesetas lo que entonces solía tener un precio de 100 pesetas pasó a tener un precio de 1 euro. Así más que por razón de cambio, el precio de un café, por ejemplo se elevó por obra y gracia de nuestros alegres patronos y comerciales porque una moneda de 100 pesetas se parecía a una moneda de 1 euro. El cómo y cuánto subieron los precios con la entrada en funcionamiento del Euro es un hecho conocido por todos o por lo menos intuido. Y fue un ejemplo más de las características lesivas para los asalariados del proyecto de la UE. La moneda única conectaba distintos espacios estatales con salarios, productividades y precios promedios desiguales con una tendencia a la convergencia en precios iguales pero no en todo los demás incluyendo derechos sociales ligados a los salarios indirectos y diferidos. El Euro nos unía sagrado matrimonio y en la desigualdad para siempre, en la salud de unos a costa de la enfermedad de otros.

Evolución de Precios en España con el Euro

Producto
Precio 2001 (pesetas)
Precio 2011 (euros)
Incremento/Decremento
Fuente:ceaccu

Barra Pan40/45 pts. (0,27 €)0.585%
Ternera 1ªA1.660 pts. (9,9 €)1331%
Carne de Pollo326 pts. (1,95€)2.17%
Cerdo 1ª560 pts. (3,3 €)7.3120%
Pescadilla1.200 pts. (7,2 €)9.937%
Gallos1.549 pts. (9,3 €)1339%
Bacaladilla467 pts. (2.8 €)4.9543%
Chirlas1.130 pts. (6,7 €)1339%
Cebollas106 pts. (0,63 €)1.0166%
Tomates228 pts. (1,3 €)1.838%
Peras de agua176,6 pts. (1,06 €)1.7766%
Naranjas165 pts. (0,99€)1.650%
Leche litro108 pts (0,64 €)0.8939%
Yoghourt36 pts. (0,21€)0.342%
Aceite oliva 0,4385 pts. (2,3 €)2.9528%
Aceite girasol136 pts. (0,81 €)1.81123%
Azúcar (Kilo)136 pts. (0,81 €)0.9416%
Un Donut65 pts. (0,3 €)0.563%
Coca-cola (litro)93 pts. (0,55 €)0.66 (1,00 1,5 L.)20%
Agua mineral (1l.)30 pts. (0,18 )0.366%
Sopa Maggi75 pts. (0,45 €)0.6851%
Chucherías (unidad)5 pts. (0,03 €)0.056%
Bolsa aperitivos40 pts. (0,24%)0.7150%
Ejemplos
COSTE MENÚ1.000 pts. (6,01 €)833%
BÁSICO en casa/ 4 personas
(Primero, segundo y postre)
LLENAR EL CARRO15.000 pts. (90,15 €)14560%
(Compra media semanal familia de 4 miembros)
OCIO Y RESTAURACIÓN
Entrada de cine600 pts. (3,60 €)8.5142%
Habitación doble hotel (5*)35.435 pts. (213€)24013%
Café con leche120 pts. (0,72 €)1.6122%
Cerveza (copa)150 pts. (0,90 €)2122%
Menú del día995 pts. (5,98 €)1059%
Abono fútbol102.500 pts. (601 €)1272111%
(Real Madrid “euroabono tribuna de fondo”)
Un whisky1.050 pts. (6,31 €)1059%
Máquinas recreativas100 pts. (0,60 € )167%
25 pts. (0,15€)
Paga mensual hijo8.000 pts. (48 €)6025%
Celebración cumpleaños1.500 pts. (9 €)1566%
(gasto por niño en parque infantil)
Celebrar la Comunión (gasto total medio)170.000 (1.022 €) /A partir de 3.000 euros194%
450.000 pts. (2.705 €)
Bicicleta 12 años20.000 pts. (120,2 €)15025%
TECNOLOGÍA
Ordenador personal200.000 pts. (1.202 €)800-33%
Videoconsola80.000 pts (481 €)220-100%
(todo el equipo)(PS2)(PS3 Slim)
Teléfono móvil20.000 pts. (120,2 €)300150%
CULTURA
Periódico150 pts. (0,90 €)1.511%
Entrada museo del Prado500 pts. (3 €)12300%
(entrada gral.)
Curso idiomas250.000 pts. (1.503 €)270080%
en el extranjero
Matrícula Universidad67.000 pts. (403 €)69472%
(Derecho UCM)
Bolígrafo BIC1. pts. (0,18 €)0.49172%
ROPA Y CALZADO
Deportivas Adidas8.995 pts. (54,06€)9066%
Pantalón vaquero6.200 pts.7088%
VARIOS
Caja de aspirinas450 pts. (2,70 €)4.1554%
Detergente Ariel423 pts. (2,54 €)3.1524%
1 kg.(12,60 € -3, 92 kg)
Pañales 0-1 año2.200 pts. (13,22 €)27104%
Corte de pelo señora1.200 (7,21 €)15108%
1.900 pts. (11,42 €)30163%
Paquete de Fortuna295 pts. (1,77€)3.85118%
Décimo de lotería3.000 pts. (18 €)2011%
Sortero Navidad
SERVICIOS PÚBLICOS Y TRANSPORTES
Cuota mensual Telefónica1.642 pts. (9,87€)13.9742%
(sin IVA)(1.742 pts. Desde 1 agosto)
Tarifas postales40 pts. (0,24 €)0.5108%
(carta s/normalizar)
Billete 10 viajes (Madrid)785 pts. (4,72 €)9.397%
Bajada de bandera taxi95 pts. (0,57%)2.1330%
VIVIENDA
Metro cuadrado vivienda488.422 pts.490066%
(Madrid-Barrio de Salamanca)-2935
Evolución de precios en España desde la introducción del Euro.
 
Mientras se converge en todo lo relativo a los beneficios capitalistas y las ganancias de nuestros alegres comerciales (y ello no es sinónimo de una igual escala de acumulación capitalista “europea” por rama y a igual rama por nacionalidad- se abre la brecha social entre clases en todo lo demás y de forma desigual desde el punto de vista internacional. Convergencia en los precios de la cesta de la compra y divergencia en salarios y tipos de renta. Desde 2001 hasta 2011 los salarios nominales subieron un 14%. Los salarios reales y los salarios relativos bajaron desde entonces más y más. Pero esta tendencia viene desde bastante antes, pues es el Euro no es el vector más relevante del problema, ni mucho menos el principal. El problema lo queramos aceptar o no se llama capitalismo.
En el periodo 2001-2011 el salario mínimo interprofesional subió un 32%. Desde el periodo 2001 al 2004 subió anualmente al 2%, siempre por debajo de la inflación. En el periodo 2004-2009 subió al ritmo promedio del 5% por año. En este periodo lo hizo por encima de la inflación. Entre 2010 y 2011 volvió a subir pero esta vez por debajo de la inflación con lo que se volvía a perder poder adquisitivo para unos salarios que ya de por sí son bastantes bajos. En términos globales el poder adquisitivo de los salarios viene bajando de forma progresiva desde más allá de la aparición del Euro, lo que indica que se trata de una tendencia estructural. Desde la aparición del Euro esta tendencia no hizo más que intensificarse. En comparación con el resto de economías que prevén la fórmula de Salario Mínimo Interprofesional España ocupa el noveno lugar con mayor SMI muy por debajo de la media de quienes lo tienen regulado, pero desciende hasta el onceavo puesto si se comparan los poderes adquisitivos de los mismos. Actualmente el SMI es de 21,51 € al día (645,30 € mensuales). La Carta Social Europea establece la cuantía del SMI tendría que ser igual al 60% del salario medio. De acuerdo con este criterio en España el SMI tendría que elevarse a al 969 euros.

Evolución del Salario Mínimo Interprofesional

AÑO
SMI (euros)
2000424.8
2001433.45
2002442.2
2003451.2
2004490.8
2005513
2006540.9
2007570.6
2008600
2009624
2010633.3
2011641.4
A pesar de la ilusión y del sueño europeísta embriagador lo que es un hecho incontrovertible es que los años del Euro y de crecimiento del PIB no han supuesto una revalorización de la remuneración salarial de los trabajadores. Al contrario. Trabajamos más por menos y durante más tiempo. Y por el lado de precios de los bienes de consumo éstos no han hecho más que subir y subir por encima de los salarios.

Comparativa de Evolución de Salarios Nominales y Salarios Reales

Año
Salario Nominal (euros)
Salario Real (euros)
20001335.21335.2
20011379.871332.06
20021432.251335.39
20031490.321348.55
20041533.811346.97
20051571.991335.51
20061646.961351.68
20071713.161367.89
20081800.031380.97
20091857.981429.54
20101875.231417.31
GananciaNominal = 540.04Real = 82.11
Periodo 2000-2010
Viendo los valores y evolución de los salarios nominales, lo primero que hay que decir es que los salarios nominales no tienen en cuenta el coste de la vida. Si a la evolución de los salarios nominales les aplicamos la evolución del coste de la vida, rápidamente observamos lo que todos intuimos: que toda subida nominal está devaluada por la subida del IPC. A diferencia del salario nominal el salario real sí que tiene en cuenta a este factor por lo que permite calibrar de mejor forma el poder adquisitivo de los asalariados. Pero esta concepción del salario también presenta una serie de problemáticas ya que deflactar los salarios nominales para conocer los salarios reales supone entrar en el concepto del IPC, que no está exento de. EL IPC viene a medir el crecimiento de los precios de algunos de productos –no todos- que define la cesta de bienes de consumo y bien puede suceder que no todos los elementos que sirven para determinar el IPC sean representativos de los bienes de consumo que los asalariados necesitan obtener. A este respecto señalar que el coste de la vivienda, que detrae de los salarios, desde un 30% hasta un 59% de los mismos, no forma parte de la lista que sirve para contabilizar el IPC.
Una mejor aproximación para estimar la valía de los salarios es deflactarlos por el PIB y esto nos lleva al concepto del salario relativo, que expresa la proporción de renta de los trabajadores, el porcentaje de estos sobre el PIB en relación con otros tipos de remuneración no salarial, es decir, en relación con las rentas del capital en sentido estricto, y con otras rentas por ejemplo mixtas. El salario relativo indica cuanto se empobrecen o no los asalariados respecto a sus condiciones materiales de vida.
En función de este concepto la evolución del salario relativo muestra una caída acentuada de los salarios respecto a los beneficios capitalistas. En este año, la participación de las rentas de los asalariados sobre el PIB ha caído por debajo de la participación de las rentas de los capitalistas.
Excedentes-Asalariados-España

En el año 2000 las rentas del Trabajo suponían el 49,5% frente al 43% de las Rentas del Capita. En el año 2006 las rentas del trabajo suponían un 47,3% del PIB frente a un 41,4% de las rentas del capital. Hacia el año 2010 la proporción cambio a 48,9 % para las rentas del trabajo y un 43% para las rentas del capital. Año 2012, las rentas del trabajo participaban del 45,73 % del pib y las rentas del capital del 45,2%. Llegados al años 2013 rentas del trabajo suponían el 44,7% del PIB y las rentas del capital el 46,3%. En el año 2014 no parece lógico aventurar un cambio de tendencia. Desde 1980 donde la participación de salarios suponían un 61,5% hemos pasado al escenario actual donde las rentas capitalistas superan a las rentas del trabajo. Y esto no es nada extraordinario en el sentido de que el capital se caracteriza precisamente por remunerar al trabajo por debajo de su propia valorización. Si no fuese así no sería capitalismo, sería otra cosa para la que por lo menos desde aquí no tenemos palabras con las que calificarlo.1362079622_855263_1362080224_noticia_normal

In the beginning.

“Sé que tenéis miedo. Nos teméis a nosotros. Teméis el cambio. Yo no conozco el futuro. No he venido para deciros cómo acabará todo esto. Al contrario, he venido a deciros cómo va a comenzar. Voy a colgar el teléfono y luego voy a enseñarles a todos lo que vosotros no queréis que vean. Les enseñaré un mundo sin vosotros. Un mundo sin reglas y sin controles, sin limites ni fronteras. Un mundo donde cualquier cosa sea posible. Lo que hagamos después, es una decisión que dejo en vuestras manos.”
Matrix.

Se puede y se debe salir del Euro. La clase obrera y otros sectores populares necesitan salir del Euro, la Unión Europea y la OTAN. Los trabajadores necesitamos salir del capitalismo. Transformar su crisis estructural en una crisis revolucionaria. Para ello, a través de las luchas hay que elevar la conciencia, forjar la unidad y la solidaridad de clase y poner en práctica, aunque no esté muy de moda, el internacionalismo proletario. Hay que recuperar la centralidad del movimiento obrero de clase en la lucha, que ha sido siempre una constante, allí donde los explotados y oprimidos por el capital se han levantado, organizado y luchado por mundo justo. Desde la televisión o las tribunas no se hará ninguna revolución. La revolución no se televisará. O se avanza en posiciones de clase en los distintos centros de trabajo y en los barrios por medio de combativas organicidades obreras (células, comités, asambleas) que se paren a pensar colectivamente como hacer frente al capital en cada espacio y luego hacer eso realidad; o se avanza en eso, o avanzará el capital: la explotación, la opresión, la pobreza, la miseria, la depredación medioambiental, la represión, la guerra, el fascismo.
Hay que avanzar en las posiciones de clase en todos los espacios sociales, económicos y políticos. Confiar y creer en la esperanza de un mundo sin explotación. Fortalecer las organizaciones obreras de clase y revolucionarias. Imponerse sobre el reformismo hegemónico y desengañarse de la ideología pequeñoburguesa que ha impregnado hasta el fondo nuestra manera de observar, pensar, decir y hacer. Luchar contra los monopolios y el imperialismo. Para expropiar los medios de producción, cambio y distribución: Reforma agraria, nacionalización de la banca y los sectores estratégicos de la economía (industria, energía, agua, transporte, comercialización, telecomunicaciones) y crear las bases de su socialización. Luchar por el poder obrero.
O empezamos a ganar la revolución antes de la revolución o no habrá revolución posible.

¡O el comunismo, o nadie!

http://www.radioactividadgranada.com/?p=2099




Comentarios