Cañamero: “Hay que parar a un Gobierno que sólo defiende a ricos y rateros”. Paco Sánchez

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El dirigente del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) Diego Cañamero intervino ayer en un acto organizado por el Frente Cívico ‘Somos Mayoría’ en Molina de Segura, donde, arropado por decenas de personas, llamó a la unidad de la izquierda para plantar cara y parar “a un Gobierno que sólo defiende a los ricos, a los sinvergüenzas y a los rateros”.

Entre otras cuestiones, se habló de la Marcha por la Dignidad que saldrá desde la Región, al igual que en otros puntos del país, para confluir en Madrid el día 22 de marzo. Esta gran movilización conjunta está promovida por diversos colectivos y movimientos sociales. En Murcia está siendo organizada por la Marcha de Mareas, plataforma que convocó la masiva manifestación del 23 de noviembre y que unió a 70.000 personas contra las políticas de recortes y por la democracia.
Además del líder sindical andaluz Diego Cañamero, protagonista de acciones de desobediencia civil en defensa de los derechos de los que menos tienen, el acto de ayer, que tuvo lugar en el Centro Las Balsas de Molina de Segura (lleno a rebosar), contó con la presencia de Carlos Martínez, presidente de ATTAC Andalucía; con la madrileña Irene Montero, joven activista de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH); y con el murciano Joaquín Sánchez, sacerdote activista de la PAH y de los colectivos más necesitados de la Región, promotor junto con otros sacerdotes y religiosos del manifiesto ‘En el nombre de Dios, ¡Basta ya de desahuciar a las familias!’. La presentación corrió a cargo de José Coy, activista de la PAH y miembro de la Mesa Estatal del Frente Cívico ‘Somos Mayoría’.
El acto comenzó con una emotiva petición de ayuda de una pareja de Javalí Nuevo, Loli y Antonio, para impedir por cuarta vez el desahucio de su vivienda, previsto para el próximo lunes, a las 10.30 horas en el número 82 de la carretera de Las Torres de Cotillas. “Necesitamos que nos ayuden”, dijo Loli con lágrimas en los ojos. Joaquín Sánchez dijo que en estos momentos de recortes sociales, laborales y democráticos “se requiere un compromiso desde la desobediencia civil, ante unas leyes cada vez más restrictivas, por lo que estamos legitimados a desobedecer las leyes para defender los derechos humanos y constitucionales y la dignidad humana. Esto da miedo, pero hago un llamamiento a desobedecer las leyes en defensa de la dignidad humana. Como dice el Papa Francisco, que no nos roben la esperanza”.
Irene Montero afirmó que “los que están fuera de la ley son los que imponen leyes injustas y restrictivas. Hace falta una rebelión contra la tiranía y la represión. Nosotros defendemos los derechos humanos, por lo que los ilegales son ellos. A nosotros nos están quitando todo, el derecho a la sanidad, la educación, la cultura y la alimentación de calidad, porque en España se están violando sistemáticamente los derechos humanos. Esto no es una casualidad ni un desastre natural, es algo sistemático de una minoría que tiene el poder y está planificando nuestro sufrimiento”.

Montero aseguró que “los grandes banqueros y empresarios nos condenan a la más absoluta exclusión y a esas personas hay que señalarlas, pues no quieren que tengamos vida digna. Reclamamos lo que es nuestro, por lo que no se trata de pedir sino de ejercer nuestros derechos. Este es el sentido de las marchas, tomar la calle en una movilización popular para construir la vida digna que los de arriba nos quieren quitar”.

Carlos Martínez comentó que “la sonrisa es también una forma de conquistar la dignidad” y dijo que la crisis “vino por una forma de capitalismo duro que quería acabar con los derechos conquistados desde el siglo XIX. La crisis ha sido fabricada, pues está haciendo más ricos a los ricos”. Martínez habló de “la tiranía de la deuda pública. Nos quitan dinero porque dicen que España está endeudadísima, pero la mayoría de la deuda es de las grandes empresas del Ibex y de sociedades como los fachas de Polaris World, a los que estáis pagando su quiebra. Hay que acabar con el negocio de la deuda, pues hay dinero de sobra pero está en paraísos fiscales”.

“Estalla Gamonal (el barrio de Burgos que ha paralizado con su revuelta popular unas obras del Ayuntamiento) cuando pensábamos que la gente empezaba a resignarse. O montamos uno, dos, cien Gamonales o nos van a torear y a machacar”, indicó Martínez, que abogó por parar a “este Gobierno de extrema derecha y esta dictadura, con un jefe de Estado corrupto, un Ejecutivo corrupto y ladrones robando desde empresas y bancos. La Marcha por la Dignidad debe ser el inicio de una movilización social generalizada para defender nuestro futuro, a nuestros viejos y a nuestros hijos. Tenemos que organizar nuestra respuesta política. Nos tienen miedo y por eso nos quieren reprimir. En esta marcha tienen cabida todas las personas que piensan que tenemos derecho a una vida mejor”.
Diego Cañamero afirmó que “no basta con decir las soluciones a los problemas. El principal problema es la división de la izquierda, que está troceada y hay peleas por llevar una pancarta o por ir en unas listas. Eso lo sabe la derecha y saca la apisonadora. Sabe que mientras que cada uno vaya con su bandera y no vayamos con el mismo martillo que golpee a la vez, no podemos hacer nada. Ellos tienen a la Policía, a los jueces, a los sinvergüenzas y a los rateros, y si no estamos unidos no cambiaremos nada. Hace falta que el pueblo esté unido y no tenga miedo. PP y su partido fotocopia son exactamente iguales, se diferencian solo en algunos detalles, pero circulan por la misma autovía. Gobiernan para la minoría rica y no para el pueblo”

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