Pasó por el barrio Ardi Beltza genero humano en alza. Nos encontramos en Agosto del 2013, jaia y lucha caminan con ella las calles, hay que regenerarse. Movilizaciones, eventos y emblemas de carácter internacionalista suman perezosos; alas y olas activas de indignación se expanden en dirección a todos los océanos. Por el barrio entran jaiak y también duelos, convivencia activa inevitable; el sistema opresor al acecho sobrevuela a la vista. Reafirmación y denuncia una constante, enaltece la raíz de mi gente. Desfila la eterna casta proletaria avivando la palabra escrita y la esperanza de los pueblos que sueñan luchando; unión voluntaria de carácter militante. Es su percusión sonora una movilización antimperialista de alerta al enemigo, rendirnos jamás!
La mano del crimen
Los revolucionarios se integran contra crímenes imperiales. Sed
de vida, sed de amor y sementera, confirman las coordenadas. Si lo
desean, observen alternativas insertas en su constante, faros de luz que
enfocan a la Casa Blanca del crimen y al corazón del nazismo germano de
la banca europea. La jerarquía del sistema se fracciona en táctica de
exterminio; serpientes y víboras contra serpentinas de vítores, banderas
y pancartas reivindicativas, cantos, consignas y desfiles suman la
historia. Los pueblos no olvidan su piel curtida, tiene memoria.
Imponen enriqueciendo a unos-matando de hambre a otros
Así
amplía sus capas donde antes no llegaba el pueblo. El dinero es un don
poderoso, consumir está por encima de todo vínculo humano; el triunfo
popular de las masas voluntarias no puede estar al lado del que
enriquece sin producir ni amistad. El mundo en sus manos es bandera de
corrupción contra culturas que conforman el conjunto de la esencia de lo
humano. Pañuelo de lágrimas que de manipularlo han hecho de él jirones
incalculables segando a la clase obrera, palabra en extinción? La marcha
fúnebre de Beethoven languidece ante la insaciable corrupción que te
maniata en la desesperación; así es como ellos se ven bonitos y éticos,
así es como empiezan agradecer a sus vísceras la degradación y a no
querer entender tu desespero; así es como llegan a justificar las
muertes macabras imponiendo el idioma del imperio como verso universal;
la economía de los pueblos se desquebraja y el estudio de idiomas se
convierte en negocio triunfal, la explotación se amplia. Los fondos
monetarios imponen la impotencia individualizada a las masas populares.
Partidos y sindicatos se hacen el sonso y los suicidios por desahucio no
son la respuesta. Feos muy feos los días que suman millones de
desocupados en el mundo capitalista. Y, los serviles siguen viendo
sugerentes las franquicias y sus alienantes modas de diseño que fulminan
todo antepasado por bello que fuera. Kaiku!, no te escondas, eguzki
añora los colores de tus cuadros verdinegros, asoma al balcón!
La Crisis capitalista se impone a los nadie
Con
ella la incredibilidad de partidos, sindicatos y más de un movimiento
social ciudadano suman impotencias; el sentir popular en sus manos se
debilita, entretienen con el 'derecho a voto', para desquebrajar tu voz y
algunos ya ni sonido en ella o son silenciadas a látigo, porra
represiva contemporánea impuesta por crisis de arriba hacia abajo, éstos
últimos son los únicos que la sufren. El sistema opresor nunca dimite.
Leyes, reprimendas y cárcel son bombones de licor de diamante para
hacerles aún más fuertes en la antesala del poder para mejor saltar
sobre sus presas. Pensar de abajo arriba se castiga. Ser diferente a lo
establecido se pena hasta con pena de muerte democrática “tiro al aire y
caen insumisos”. La leyes oprimen, no ser nada sirve a sus servicios
que son como páginas de ley, inquisición impuesta. Partidos y sindicatos
se reafirman en el sistema capitalista, “su calidad de vida” supera con
creces a los que luchan contra el.Muchos medios de expresión engordan cuando adulan con flores expresivas el sistema, favorece mejor el cordero que la morcilla, las ostras a las lentejas o al arroz con habichuelas.
La dignidad depende de mi firmeza
La
tuya sólo sería insuficiente, es frágil, delicada como amapola, el
estrangulamiento en sus manos es factible no lo permitas, niega el
oxígeno de las amapolas y las flores se debilitan en la convivencia con
ellos. No hay otra que luchar; ser o no ser servil, plantéense la
envergadura del asunto, para que los que se autodenominan partido,
sindicato, movimiento x, vivan como los de a pié o tu vivas como ellos
por más derechos, eres el que paga el vicio que derrochan, incluida su
verborrea altanera de superioridad, perfil servil que engorda en todas
las crisis del capitalismo ciclo a ciclo generación tras generación;
casta de esbirros que se perpetua, ejercito civil que se impone a tu
voluntad y derechos.
Rodemos las alfombras que cubren la raíz de la tierra
Nunca
lo rojo de lo histórico tan intenso y espeso. No te sientas desheredado
la desconfianza no es buena consejera, largas han sido las cadenas.
Inteligencia y sabiduría enriquece sus tumbas. Brota en ellas la nota
alta en amor colectivo donde un derroche de fronteras alimenta espíritus
combativos de idealismo. Fuerza antimperialista les une y rezuma en
nosotros en generosidad; son sus huertos selvas humanas y sus proclamas
se avecinan sobre los desiertos en forma de oasis. Llegan como alarma
contra los propietarios del túnel de lo oscuro donde quieren llevarnos a
parar. La boca de sus cuchillas está a la entrada, los dientes son
balas imperiales. Sierra metálica del capitalismo fiel servidor del
imperio, una maldición afilada a doble filo nos desangra. El amanecer
tarda. Lento pero llega no desesperen, la unión de proletarios
desheredados de industria llega. Que los pueblos no languidezcan su
espera! Camina, hacia la luz del día donde los sindicatos concebidos
como institución queden abolidos. Se imponen las corrientes sindicales a
modo de asambleas, donde el dirigente sindical no está concebido como
un distorsionador destacado por el bienestar del opulento. Por el
contrario, el concepto de agrupamiento y lucha lo reafirma desheredado
del capitalismo pendiente de revolución, no como gusanera vividora a
costa de su clase dando tumbos hacia el capital, seguro del camino
regado durante siglos.
No desprecies la explosión de luz acumulada
Deja
que centelleen los ansiados ojos que buscan mirar hacia el gran ojo de
luz; sal de vida agua marina, el mar ya se adivina la luz es claridad.
De su lado parte conciencia, inteligencia y dignidad, la nota más alta a
la que aspirar para seguir viviendo, llegar al grito y arrancar la
alegría de trabajar y vivir en la propia tierra. Grito colectivo de
esperanza que reviente el sistema, grito de justicia que alumbre para la
eternidad. Nueva luz de cosechas por donde desfile gallarda la raíz
laboriosa, prenda el alba en revolución, a qué se espera?, llama que
nunca se ha de apagar. Es el grito una vigilancia de alerta sobre el
planeta; llama histórica, llama simbólica, fueguitos de defensa
dirigidos hacia el nazismo para su exterminación. La sostengo en mis
manos para toda la vida entregar mi corazón así pasen mil años,
libertad. Así la siento para poder refrescar el aliento sobre la odisea
implacable.
No más palmas en la cara y en el pecho, no más culpabilidad
Por
qué?, se preguntan algunas madres a la vez que miran con impotencia a
sus hijos y el por qué, muere cabalgando en su propio eco. Palmas de
castigo percuten sus carnes, huesos, dolor de pecho y corazón, sangre y
sentimientos en evolución de sueños y amor, palmas hasta desfallecer,
palmas, por qué, por qué, por qué. . . Cuánto odio encierra la ideología
de la guerra. Cuantos genocidios y el mundo estremeciéndose en llanto!,
sin conciencia no somos nadie. Se propagan los actos de rebeldía, el
día de la ira se avecina como parte de la rosa y el mar, como contesta a
los pechos oprimidos. Los pueblos caminan, aunque desamparados,
caminan. Huye el cobarde ante el valle de lágrimas servidor del
capitalismo y su imperio enemigo de la humanidad abrazando crisis.
Crisis les revitaliza, engorda ongs, sindicatos y partidos. Crisis?,
puro cuento. Máscara sin antifaz, crudo sistema vomitivo, en boca del
corrupto suena irónica la palabra. El castigo del desprecio a los
pueblos oprime las gargantas y estrecha cinturas insumisas, ambas se
siente acorraladas por el odio. La impotencia es una lección aprendida.
Nuestros puños rompen cadenas, se desatan como agentes de una cultura de
futuro que aplastará el capitalismo y todas sus máscaras continente a
continente. No desesperen la lucha es larga, luz divina engrasando
tullidos. Mírala por donde llega, lento, pero llega.
Tu condición la sometida, sólo los bueyes acreditan el arado
Tu
fuera de lugar impuesto desde la cuna donde el mundo dejó de ser mundo
como paraíso y te sumió en la explotación de la esclavitud. Adios a la
casa de tus padres como entidad propia de historia. Transforman la vida
de gloria en infierno integrando millones de mercenarios que miran de
una y otra manera para el lado a favor del crimen, el consumismo y la
paga en sobre corrupto alimenta los instintos, maldición de medios de
comunicación escritos y visuales. Zanjan junto con las leyes a su favor
la investigación de crímenes en la historia de ayer y hoy. Bandera y
patria se convierte en moneda de pago cuando a otro lo están matando. Es
su opción “democrática” de vida, pensar que puede comer con el que te
está apuntando y fulmina los movimientos revolucionarios de clase.
Medios que prostituyen la palabra e imagen trampa, los que colaboran y
cobran del Estado como institución del sistema. Aliento nauseabundo a
favor del analfabetismo histórico, lo desangran en sus manos
argumentando con sus mejores ropas y sonrisas pagadas por servicios
mercenarios. Te hace ver que el que se resista a la estructura acomodada
para él y cobra por imponer el silencio en las calles, al asesino en
pantalla, taller de urgencia traumática a costa de mantener en la
miseria a los pueblos sometidos a la corona será un indeseable,
terrorista, delincuente marginal, desecho social que irá a la cárcel por
robar una gallina para comer, sin preguntarse que en un sistema
capitalista por pelotas ha de haber trabajo, o habrá que desvalijar las
casas de los amos, empezando por los reporteros del criminal que obliga a
que las colas del desempleo se ensanchen océanos.
Hay
capas sociales dobladas por la maldición. Ese es el grueso metafórico
llamado pueblo y no otro. Que a veces se refuerza y pasan otras nuevas
capas a ejercer de ello. Pueblo no es el mercenario, ni el que se sienta
en la mesa sin preocuparse de lo que pasa fuera de su casa. Ese pueblo
no existe en la metáfora revolucionaria y menos de clase. El populismo
fascista necesita tener lo que a otros van robando para desarmarte en
todo, porque es muy fácil ser demócrata con la boca saciada y los sobres colgando de los bolsillos.
Ni existe primer mundo ni quinto
Otro
invento del capitalismo para dejarte flojo. Atado a la marginalidad
impuesta desde la cuna para que sapos y víboras llamados humanos se
sientan importantes, satisfechos de su “triunfo profesional” sobre el
confort de sus alfombras desechables al ocaso según prime los intereses.
Es el perseguimiento constante su acoso, hasta aplacarnos como perro de
señorito sumiso lo que está en juego. Mientras ellos viven “en su
mundo”, tu miras como maldecido desde el más allá al que se sigue
disparando a favor del amo, de todos los que viven a su costa con la
misma bandera y patria como vocabulario del horror. Los crímenes de
Estado se aplauden con la justificación de lo injustificable. Desde los
servicios mercenarios a cualquier escala sumisa, por los que te quieren
imponer que ellos desde su mesa y silla también son pueblo, mientras
generales de la OTAN aseguran sus sueldos. Frente a sus ojos silla y
mesa, las casas del tercer mundo?, arden en desempleo, de hambre de
todo. . . cuando la cultura propia años que se ve reflejada en los
ataúdes de los libros como rayos que aún reflejan. Por eso intentan
desheredarte haciéndote creer que asumen esa parte de la historia de tus
héroes, no dejes que roben tu historia!
Hay continentes enteros sometidos en la misma amenaza
Arden
por manzanas de casas en hilera. Seguimos hablando del Golfo Pérsico.
Arde como focos de luz intensa en la noche, son incendiados sus sueños
que son su bandera, su vida en llamarada, sus derechos, cultura, patria
que es huerto y tierra. Noches de largas lenguas de fuego devoran el
cruce de los vientos y el vuelo de sus sueños colectivos que anhelan,
pareciera que se desvanecen. Pero el tramo de alguno de ellos es sueño
ascendente famélico no desmaya. Entonces es que más te vale desaparecer,
mercenario de la mesa del crimen, porque jamás podrás adentrar de mi
mano ni la de los hermanos de mis sueños, cuando los montes asuman las
notas y coordenadas de los acordes, ritmos que hablan mismo idioma de
lucha y no de empresa de explotación anulando las demás lenguas; sino
seres que impongan lo mitológico entre montañas y collados como raíz,
para que sobre las aguas puedan bailar danzas de amor y no de muerte.
Maité Campillo (actriz y directora de teatro)
Comentarios
Publicar un comentario