SORIA APLICA UN NUEVO IMPUESTO A LA PRODUCCIÓN DE ENERGÍA PARA CONSUMO PROPIO
Por A. RAMÍREZ / CANARIAS-SEMANAL.ORG.- El oligopolio de las grandes eléctricas en España jamás ha sido cuestionado por ninguno de los Gobiernos del PSOE o el PP. El sostén legislativo ofrecido por ambos partidos a un modelo energético que genera beneficios anuales superiores a los 6.300 millones de euros ha salido significativamente barato a estas compañías. Apenas les ha costado unos puestos de consejeros, aunque generosamente retribuidos, para ex presidentes y ex ministros como José María Aznar, Felipe González, Elena Salgado (PSOE), Ángel Acebes (PP), Miguel Boyer (PSOE), Ana Palacio (PP), Pedro Solbes (PSOE)...
Pero si hoy ha dejado de ser un secreto para quienes trabajan, en realidad, los presuntos representantes de la "voluntad popular", resulta preciso reconocer que el actual ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, se ha significado durante su mandato por su nula voluntad para tratar de ocultar lo evidente.
Rebautizado en Canarias como el "ministro de Repsol",
por su furibundo apoyo a los propósitos de la petrolera de expoliar los
recursos energéticos de las Islas, Soria se ha destacado también por su
lucha contra el desarrollo de las energías renovables y su apoyo a
técnicas tan contaminantes y peligrosas como el "fracking" o "fractura hidráulica".
En el verano de 2013, el ministro lograba incluso que la revista Forbes, que elabora el famoso ranking de las mayores fortunas del mundo, se mofara del Ejecutivo español por su ocurrencia de poner un "impuesto al Sol".
Una ley que obligaba a quienes tenían una instalación fotovoltaica de
autoconsumo a pagar por estar conectado a la red eléctrica.
Ahora, el Ministerio de Industria ha eliminado este llamado "peaje de respaldo", pero solamente para imponer una nueva tasa al autoconsumo de energía.
Este cambio conceptual aparece recogido en el borrador de real decreto
en el que se establecen las condiciones para la puesta en marcha de las
condiciones para el autoconsumo de electricidad, en el que Industria
asegura, paradójicamente, que "hace un esfuerzo por la promoción de instalaciones de pequeño tamaño".
En la memoria económica del borrador, Industria reconoce que "el aspecto más controvertido de la propuesta inicial" sobre
autoconsumo fue el peaje de respaldo, que se aplicaba al
autoconsumidor por la electricidad que generara y consumiera con el
objetivo "contribuir" a los costes del sistema eléctrico, incluido el de las redes eléctricas.
A partir de ahora, Industria saca de las redes de los costes del llamado autoconsumo instantáneo.
En concreto, diferenciará entre un peaje para sufragar las redes, que
el autoconsumidor solo costeará cuando esté vertiendo o recibiendo
electricidad a la red, y los cargos del sistema, que cubrirán desde las
primas a las renovables hasta las anualidades del déficit de tarifa. El
autoconsumidor deberá sufragar siempre este segundo concepto.
Como novedad y tercer concepto, se crea el "cargo por autoconsumo", destinado a "cubrir
los servicios de balance necesarios en el mercado de producción". Este
cargo "se aplicará sobre la energía autoconsumida”.
Para justificar la medida, el Gobierno indica que el autoconsumidor "se
beneficiará del respaldo que le proporciona el conjunto del sistema,
aun cuando pueda estar consumiendo electricidad producida por su
instalación de generación asociada, al contrario de lo que ocurriría si
se encontrara eléctricamente aislado del sistema eléctrico".
Sobre el coste de las redes de transporte y distribución, el departamento dirigido por José Manuel Soria arguye que "se
aplicarán como contribución a la cobertura de los costes de dichas
redes y serán aplicados considerando el uso real que se realice de
ellas".
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