"El Brigadista", Película Cubana De 1977.Alfabetización de ayer a "Yo Sí Puedo" con el que hoy Cuba a alfabetizado a tantos millones por todo el mundo


"El Brigadista", Película Cubana De 1977 - The funniest bloopers are right here


El Brigadista (1977), es una hermosa película dirigida por Octavio Cortázar que trata sobre la Campaña de Alfabetización en Cuba, y ha sido uno de los grandes éxitos del cine cubano de todos los tiempos.
La trama transcurre durante la campaña de alfabetización realizada en Cuba en 1961 por miles de jóvenes y adolescentes. Un joven alfabetizador, de procedencia urbana, llega a un pequeño pueblo cercano a la famosa Bahía de Cochinos (Playa Girón). Deberá vencer la resistencia de algunos de sus pobladores, debido a su juventud y habituarse a un medio natural totalmente desconocido.

Mientras redactaba el artículo sobre el documental Por Primera vez, que fue una crónica del testimonio de la alfabetización cinematográfica, me vino a la mente el filme El Brigadista. Si por Primera vez fue prácticamente la opera prima de Cortázar en su plena juventud, cuando acometió el brigadista ya era un cineasta maduro.

Cortázar había filmado y se había adentrado en la naturaleza de la Ciénaga de Zapata. El hombre de ciudad se fascinaba con la flora y la fauna a exuberante de la Ciénaga. Esta locación determino en gran medida el encanto de esta película.

El equipo de actores era excelente. Salvador Wood en su mejor forma, interpreta un campesino analfabeto, algo rudo por sus modales, un hombre de campo, el mismo Salvador definió al personaje como un hombre honorable.

El también actor cubano Patricio Wood, hijo de Salvador, con sus 15 años un debut por todo lo alto bajo la mirada vigilante del padre.
René de la Cruz también en un gran momento de su carrera formas parte del pelotón de campesinos que están talando en la Ciénaga.
El filme narra la llegada del joven al campamento rústico El Brigadista, casi un niño de ciudad buscando la manera de adaptarse al entorno. Da clase por la noche y durante el día trabaja con los campesinos.

Mientras se desarrollaba la alfabetización en el país, la contrarrevolución infiltraba agentes y utilizaba todos los recursos para destruir el joven proceso (recordemos que estamos en el año 1961, a solo dos años de 1959).

En el rol de jefe contrarrevolucionario estuvo Mario Balmaceda, que interpreta con convencimiento un personaje que quizás por ser del desagrado del director y del coguionista, Luis Rogelio Nogueras, no logra un actuación destacada. Sin embargo, saca adelante este personaje un poco esquemático.

El filme transcurre entre las jornadas de trabajo en los campos y las sesiones nocturnas que imparte el joven maestro. Estas actividades paralelas agotan a los campesinos quienes a veces se quedaban dormidos en las clases.
El brigadista, casi un muchacho, llama la atención a sus alumnos, alguien trata de burlarse de las clases, pero el personaje interpretado por Salvador Wood interviene con seriedad y algo de humor, de esta escena sale una frase célebre del filme: “El que quiera relajo y guateque, va a tener un guateque particular conmigo”.

Cuando el trabajo del maestro está bien avanzado, y ha logrado establecer óptimas relaciones con los campesinos, una noticia tremenda llega al pueblo: ha sido torturado y asesinado un brigadista.

A partir de ese momento, la hermandad entre el joven y los campesinos es cada vez mayor, hacen guardias juntos, trabajan juntos, se divierte y todo transcurre sin mayores incidentes hasta que termina el curso. La despedida del maestro, quien se ha convertido en un hijo más para aquellos guajiros, fue tremendamente conmovedora.

El filme tiene un final muy emotivo, inolvidable para los que fuimos jóvenes en aquella época. Se alza la band era de la Alfabetización en el árbol en que fuera ultimado un brigadista. La imagen del maestro asesinado Conrado Benítez, está presente en la bandera y en el corazón de todos los asistentes. Es este un filme que todos debemos ver al menos una vez, y que debe ser transmitido de padre a hijo para que se vea cómo nuestra juventud contribuyó desde sus primeros años con la Revolución.


Campaña de Alfabetización
Permitió erradicar el analfabetismo y facilitar el acceso universal a los distintos niveles de educación de manera gratuita. Programa de la Revolución favorecido por un clima educacional donde la radio, la televisión y la prensa desempeñaron un papel fundamental en la divulgación de los conocimientos de higiene, salud, de los problemas del sector agropecuario y los relacionados con el arte y la literatura, entre otros que, al mismo tiempo que ofrecieron información, motivaron al adulto hacia el aprendizaje de la lectura, la escritura y los conocimientos elementales de aritmética.
La Campaña en Cuba evidenció que la alfabetización de un pueblo, tanto como el hecho educativo mismo, es un acontecimiento cuyo éxito depende de la participación masiva y unánime de todas las organizaciones existentes y de todos los sectores de la población, sin descuidar su aspecto técnico organizativo.
El tercer año de la Revolución, 1961, fue decisivo para la historia del pueblo cubano. A la proclamación del carácter socialista de la Revolución, la victoria de Playa Girón y otros importantes acontecimientos se le sumó la Campaña de Alfabetización. El 22 de diciembre de 1961, Cuba fue proclamada Territorio Libre de Analfabetismo.

Contenido


Surgimiento

Esta campaña tuvo sus antecedentes en el Ejército Rebelde, durante la guerra de liberación y, luego, con el triunfo de la Revolución, la Dirección de Cultura de esa fuerza armada inicia, en febrero de 1959, la alfabetización dentro de sus filas. El Ministerio de Educación, al mes siguiente, crea la Comisión Nacional de Alfabetización y Educación Fundamental, que al igual que el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), enseña a leer y escribir a algunos miles de cubanos en distintos lugares de la Isla.
Durante 1960 en Melena del Sur se creó el Consejo Municipal de Educación integrado por destacados pedagogos locales con la colaboración de las organizaciones políticas y de masas y el pueblo en general, esta estructura tendría la responsabilidad de dirigir la épica batalla de llevar los conocimientos a todos los rincones del país.
Logo utilizado para la campaña
Sin embargo, la campaña masiva de alfabetización es anunciada, el 29 de agosto de 1960, en la graduación del primer contingente de Maestros Voluntarios, cuando Fidel revela: El año que viene, vamos a librar la batalla contra el analfabetismo. El año que viene tenemos que establecernos una meta: liquidar el analfabetismo en nuestro país.
Entre septiembre y diciembre de ese mismo año se iniciaron los trabajos preparatorios con la realización de un censo que arrojó un total de 2 mil 868 analfabetos en el territorio.
Llega a su fin el año 1960, y el 31 de diciembre, junto a miles de maestros, el Comandante en Jefe, espera el Año de la Educación en Ciudad Libertad, y allí vuelve a reiterar la idea de erradicar el analfabetismo en solo un año, al explicar que las dos grandes tareas para el nuevo año son la educación y la defensa.

Cuba en campaña

Se inicia así, oficialmente, el 1 de enero, la Campaña de Alfabetización, en su primera etapa: la organizativa, en medio de la primera movilización popular en defensa de su pueblo.
En los primeros días de enero, el gobierno norteamericano, encabezado por el presidente Eisenhower, a solo tres semanas de expirar su mandato, rompe relaciones diplomáticas con Cuba. Mientras, la prensa estadounidense realiza una campaña desenfrenada con el fin de tratar de justificar una intervención armada a Cuba.
La peligrosa situación que se cierne sobre el país hizo que se detuvieran algunos planes del hermoso desarrollo de la Revolución. Sin embargo, a pesar de la contingencia militar, la preparación de la campaña de alfabetización continúa su rumbo: defensa y alfabetización se dan la mano, avanzan simultáneamente.
El 23 de enero, durante la graduación del segundo contingente de maestros voluntarios, Fidel informa del asesinato de un joven maestro voluntario: Conrado Benítez, y con voz emocionada, exclama:
¡Después de muerto ese maestro seguirá siendo maestro! (...) Ese maestro es el mártir cuya sangre servirá para que nosotros nos propongamos, doblemente, ganar la batalla que hemos emprendido contra el analfabetismo (...) El mártir del Año de la Educación, el mártir de los maestros.
El 28 de enero, en homenaje al natalicio de José Martí, el jefe de la Revolución preside la conversión de la antigua fortaleza militar de la ciudad de Santa Clara en una escuela. Casi al concluir sus palabras reitera que la alfabetización es una de las más grandes batallas por la cultura que haya librado ningún pueblo: Va a ser una batalla verdaderamente épica, en que debe participar todo el pueblo. Y más adelante, afirma: Hay que comenzar a organizar ese ejército y vamos a organizar cien mil jóvenes alfabetizadores que por lo menos tengan de sexto grado en adelante, y por lo menos 13 años de edad. Al mismo tiempo, le pide a los jóvenes villareños, sean los primeros en inscribirse.
Diez días después de asumido el mandato, el nuevo presidente de Estados Unidos, John F. Kennedy, anuncia un agresivo plan contra Cuba. El país vive bajo condiciones de guerra no declarada, sin embargo, Fidel no descuida la campaña de alfabetización, y pocas horas después, en este ambiente, visita la Comisión Nacional, donde aborda temas relacionados con la creación de las brigadas de alfabetización que llevarán el nombre de Conrado Benítez.
Además, en medio de esta etapa organizativa, comienza a desarrollarse la alfabetización en dos lugares muy bien destacados del territorio cubano, a través del Plan para la Ciénaga de Zapata, el 3 de febrero, con 200 alfabetizadores, y el Plan Escambray, en marzo, con 640.
El 28 de febrero, Fidel vuelve a visitar la Comisión Nacional, esta vez para despedir el primer grupo de jóvenes que integran las Brigadas Pilotos Conrado Benítez que salen hacia las zonas rurales para alfabetizar. Allí da indicaciones para que desde el 6 de marzo puedan inscribirse todos los que deseen integrar estas brigadas.

Brigadistas obreros

Dos meses después de la victoria de abril, el 18 de junio, se efectúa la primera graduación masiva de tres mil 500 alfabetizados de La Habana. A partir de este día, miles de cartas son recibidas, escritas por los alfabetizados, dándole las gracias a Fidel. El final de la primera de ellas, dice: Ya nunca tendré que firmar con los dedos ahora siempre firmaré así: María Cruz. Las palabras de Fidel vuelven a reiterar que a pesar de la invasión y de otras agresiones, la alfabetización no se interrumpió. El 30 de junio, pronuncia el histórico y vigente discurso, conocido como ''Palabras a los intelectuales'', donde expone con mucha más claridad la política cultural de la Revolución.
En el acto en homenaje al 26 de Julio, Fidel reitera el papel de los jóvenes en la alfabetización. Ese día se declara la Ciénaga de Zapata Territorio Libre de Analfabetismo, y el 27, Fidel, inaugura, en Playa Girón, el Parque Turístico Nacional, destacando la tarea de los brigadistas del lugar.
Cuatro meses y medio faltaban para culminar el año y cumplir el compromiso de erradicar el analfabetismo. Era preciso nuevas fuerzas alfabetizadoras. Así, el 18 de agosto, Fidel clausura la Plenaria Nacional Obrera de Alfabetización en el teatro Chaplin, y allí convoca a los obreros a integrarse en brigadas para impulsar la alfabetización. Una vez más, Fidel los llamaba, primero para la defensa de la patria, ahora para la educación del país, y les dijo: Ha llegado el momento de acudir a esa fuerza. Esa era la fuerza que teníamos de reserva, la clase obrera. Nosotros sabemos que movilizando a la clase obrera le damos ya a la Campaña el aporte final que necesita. A este llamado respondieron los obreros y se agruparon en Brigadas Obreras denominadas Patria o Muerte.
Entre los días 2 y 5 de septiembre se efectúa el Congreso Nacional de Alfabetización con el que se impulsa la última fase de la Campaña. Fidel lo clausura, explica la marcha de la Campaña y pide un último esfuerzo.

Final y Triunfo de la campaña


El 22 de diciembre de 1961 Cuba fue proclamada Libre de Analfabetismo

Es asesinado por bandas contrarrevolucionarias, el 3 de octubre, cuando la campaña comienza la cosecha grande de alfabetizados, el brigadista Patria o Muerte, Delfín San Cedré. Más que amedrentar, se responde: En el mes de noviembre comienzan las graduaciones masivas de alfabetizados en las fábricas, campamentos, centrales azucareros, municipios...
Por día aumenta, vertiginosamente, la cantidad de alfabetizados. El 5 de noviembre, el primer municipio en erradicar el analfabetismo es Melena del Sur, izándose la bandera de la alfabetización, forma de reconocer a los lugares que cumplían el compromiso. Ese día en la declaración de Territorio Libre de Analfabetismo, Fidel, manifiesta, dirigiéndose a los alfabetizadores presentes: ¿Ustedes han terminado ya aquí? Pues bien, inmediatamente, a reforzar a otros municipios. Esto es como la guerra, una Unidad tomó posición y lleva inmediatamente sus fuerzas donde la batalla es más dura. Y aquí hace el llamado para culminar la Campaña el próximo 20 de diciembre.
A Melena del Sur siguieron los municipios de San Antonio de las Vegas, el 7 de noviembre; y Santa María del Rosario, el día 9. Más tarde: Marianao, Fomento y Mayarí.
Los bandidos contrarrevolucionarios en el Escambray asesinan, el 26 de noviembre, al brigadista Manuel Ascunce Domenech y al campesino Pedro Lantigua Ortega, considerados desde entonces, mártires de la Alfabetización. La otrora provincia de La Habana, el 7 de diciembre, es la primera en declararse Territorio Libre de Analfabetismo. Hasta el 9 de diciembre, 49 municipios han erradicado el analfabetismo. Ya la batalla es un triunfo. Desde el 13 de diciembre se convoca a los habaneros a albergar en sus casas a los brigadistas que van culminando su labor. Esa semana se inicia en la capital La Semana del Brigadista. Todos esperan deseosos la proclamación de la victoria, y el 20 de diciembre se declara terminada oficialmente la Campaña de Alfabetización. A partir de este día aumenta la llegada de brigadistas a La Habana. Ocho meses después de la victoria de Girón, el 22 de diciembre, Cuba se proclama Territorio Libre de Analfabetismo.
Habían sido alfabetizados 707 mil cubanos, por lo que el índice de analfabetismo en Cuba quedó reducido a 3,9 % de su población total, incluyendo a 25 mil haitianos residentes en las zonas agrícolas de Oriente y Camagüey, quienes no dominaban el idioma español, a los impedidos físico y mentales, y a las personas que, por su avanzada edad o deficiente salud, fueron declarados inalfabetizables. Ello colocó a nuestro país entre las naciones de más bajo índice de analfabetismo en el mundo. Este extraordinario logro revolucionario fue obra de una poderosa fuerza, constituida por 121 mil Alfabetizadores Populares; 100 mil brigadistas Conrado Benítez; 15 mil brigadistas Patria o Muerte; 35 mil maestros voluntarios, lo que hace un total de 271 mil educadores; lo que, unido a los cuadros dirigentes, los cuadros políticos y los trabajadores administrativos llegan a la impresionante cifra de más de 300 mil participantes en la Campaña.
Aquel 22 de diciembre de 1961, las palabras de Fidel resumen esfuerzo:
Ningún momento más solemne y emocionante, ningún instante de legítimo orgullo y de gloria, como este en que cuatro siglos y medio de ignorancia han sido derrumbados. Hemos ganado una gran batalla, y hay que llamarlo así -batalla-, porque la victoria contra el analfabetismo en nuestro país se ha logrado mediante una gran batalla, con todas las reglas de una gran batalla. (...) Esa capacidad de crear, ese sacrificio, esa generosidad de unos hacia los otros, esa hermandad que hoy reina en nuestro pueblo. ¡Eso es Socialismo!
A las palabras de Fidel, retumbó en la Plaza de la Revolución la unánime respuesta de todos los brigadistas:
¡Fidel, dinos que otra cosa tenemos que hacer!

Mártires de la Alfabetización en Cuba

Véase también

  • Librínsula, Imaginarios: Aniversario 50 de la Campaña de Alfabetización[[1]]

Fuentes

  • Dora Alonso El año 61, La Habana, Editorial Letras Cubanas, 1981, 100 pp. Colección Testimonio
  • Montalván Lamas, Olga. Un trascendente hecho de cultura: La Campaña de Alfabetización, en Debates Americanos. No 11. Habana. 2001.
  • Educación en Cuba


Campaña de Alfabetización

Brigadista con cuaderno de alfabetizar
Fecha: 1961
Descripción:
Campaña revolucionaria que permitió erradicar el analfabetismo y facilitar el acceso universal a los distintos niveles de educación de manera gratuita
País(es) involucrado(s)
Cuba
Ejecutores o responsables del hecho:
Jóvenes y Obreros

 http://www.ecured.cu/index.php/Campa%C3%B1a_de_alfabetizaci%C3%B3n 

http://www.videos.cubacineonline.com/



Programa cubano de alfabetización "Yo si Puedo". 

Contenido

Antecedentes

Los antecedentes del programa “Yo si Puedo” están en los trabajos desarrollados por la Doctora en Ciencias Pedagógicas Leonela Relys Díaz, junto a otros educadores cubanos en la República de Haití, quienes desarrollaron una campaña de alfabetización por radio. El programa nació el 28 de marzo de 2001, cuando el gobierno de Cuba le encomienda la labor a Leonela de crear una cartilla de alfabetización, de no más de cinco páginas que combinara las letras y los números. Esta encomienda se cumplió en un mes y de inmediato se inició el diseño de la estrategia televisiva. Para el año 2002 ya se ultimaban las cartillas y los guiones de las clases televisadas. El programa se concibió con un carácter internacionalista, especialmente latinoamericanista, preparado para ser adaptado a diferentes realidades sociales y lenguas.
Este programa se desarrolla a través de un método de enseñanza compuesto, en el que se utilizan los números para facilitar el proceso de aprendizaje de la lecto-escritura; se asocian los números con las letras y se parte de lo conocido para alcanzar lo desconocido. Tiene como objetivo fundamental la inserción activa de los participantes en el quehacer social, económico y político de la comunidad del país donde viven. Además de recursos audiovisuales, se utiliza un facilitador quien se encarga de trasmitir los conocimientos y es el vínculo entre la clase audiovisual y el participante. Desempeña además una función imprescindible en lo referente al trabajo con la parte afectiva del iletrado y el control en su proceso de aprendizaje.
Está dirigido a aquellas personas mayores de 15 años que nunca concurrieron a la escuela o que tan sólo cursaron algunos años y que se han olvidado de lo que aprendieron. Se encuentra regido por un principio identificado con el método: “Yo si puedo”. Este persigue una Alfabetización concientizada y transformadora, además de educadora.
Consta de tres etapas: adiestramiento, enseñanza de la lecto-escritura y consolidación, siguiendo tres hitos importantes: escuchar y ver, oído y ojos; escuchar y leer, oído y libro; así como, escuchar y escribir, oído y lápiz. El módulo docente lo integran la cartilla, el manual y 17 videos que incluyen las 65 clases. El tiempo de duración de la acción educativa es variable ya que el método es muy flexible. Desde un máximo de tres meses hasta siete semanas, en forma intensiva. Existen experiencias de realizarlo en un mes de forma muy intensiva, con personas dedicadas exclusivamente a recibir el programa. El programa existe además en Sistema Braille, para sordos y personas con problemas intelectuales leves.
Los resultados de este programa han sido altamente positivos y se le describe como un método económico, muy flexible, sin exclusiones de ningún tipo y con capacidad para ser adaptado a cualquier país o comunidad. Hasta la actualidad se han alfabetizado alrededor de 5 millones de personas adultas, por el esfuerzo de 28 países en el mundo, destacándose las campañas desarrolladas en Venezuela, Bolivia, México, Argentina, Ecuador, Perú, Honduras, Nicaragua, República Dominicana, Granada, Brasil, Nueva Zelanda, Mozambique, Guinea Bissau, Colombia, El Salvador, Uruguay, Guatemala y Sant Kitts y Nevis.

El método

El programa “Yo si Puedo” divide la acción formativa en tres estadios diferentes: adiestramiento; enseñanza de lectura y escritura; y consolidación. El diagnóstico pedagógico de las personas iletradas; así como el conocimiento amplio de su idiosincrasia, constituyen elementos indispensables para el éxito del programa. A través del diagnóstico pedagógico se puede conocer los niveles de conocimiento de los alumnos, los que pueden clasificarse en tres niveles, a saber:
  • Iletrados Puros, que no han tenido ninguna relación con la enseñanza, no han ido nunca a la escuela.
  • Semi-iletrados, han ido a la escuela o saben escribir alguna letra o palabra, o han olvidado lo aprendido por no hacer uso de ello.
  • Iletrados Especiales, son personas con necesidades educativas especiales, por lo que se debe tomar en cuenta las limitaciones físicas que presentan.
El programa tiene una etapa previa de preparación y adecuación al lugar donde se va a ejecutar. Hay que adaptarlo a la realidad e idiosincrasia de la propia sociedad que va a recibir el beneficio. Esto se hace junto con la organización que lo vaya a ejecutar en el lugar concreto. El módulo docente lo constituye la cartilla; y 17 videos que incluyen las 65 clases.

Las etapas

Las etapas formativas son tres y tienen duración diferente. De las 65 clases que completan el método, 10 se dedican a la primera etapa de adiestramiento, 42 a la etapa principal de aprendizaje de la lectura y escritura, y 13 a la de consolidación.
En la etapa de adiestramiento se realiza una preparación del alumno para su posterior implicación en el aprendizaje de la lectura y la escritura. Para ello se emplean 10 clases estructuradas en dos bloques, el primero de ellos es de cinco clases. El primero está destinado al desarrollo de la expresión oral y de las habilidades psicomotrices, así como el asegurar la representación gráfica de los números del 0 al 30 (los números suelen ser conocidos por la mayoría de los alumnos). El segundo bloque se encarga del estudio de las vocales.
El aprendizaje de la lectura y escritura, se constituye en la principal etapa, pues en ella el alumno aprende a leer y a escribir. Consta de 42 clases, donde las primeras 23 están destinadas al aprendizaje de las letras y fonemas; para ello se dedica cada día a una letra o fonema concreto, quedando resuelto el mismo en esa jornada.
Las otras 19 clases se destinan a las dificultades particulares que presenta el idioma en el castellano o español, se dedica a las combinaciones especiales como el uso de la “rr”, la “ll” o la “ch” o los sonidos de la “ce”, “ci”, o la “güe” “güi”. Los ejercicios utilizados son la relación de un número conocido con una letra desconocida. El reconocimiento de una figura sencilla y su relación con la palabra objeto de estudio. La presentación de una idea u oración, en la cual hay que determinar la palabra clave que luego hay que dividir en sílabas, para realizar al final la producción de nuevas palabras e ideas.
La etapa de consolidación se destina a fijar los conocimientos adquiridos en la etapa anterior. También sirve para evaluar la consecución de los objetivos perseguidos. Se utilizan 13 clases de las cuales, dos son finales de redacción. Las dificultades de la grafía se resuelven y consolidan utilizando un sistema lúdico, como si fuera un juego. Identificación de imágenes y escritura de su nombre. Se desarrolla una escritura y una lectura inteligente, aún a nivel elemental, construyendo frases que tengan sentido lógico.

El encuentro presencial

En la planificación de las clases presenciales se dedican los cinco primeros minutos de ella a interesarse por las actividades diarias de los alumnos, por las dificultades que encuentran en el aprendizaje y controlar la asistencia, además de motivarles. Una vez pasado este tiempo se divide la clase en dos períodos de 30 minutos, con 15 de intercambio activo y un descanso de 10. En los primeros 30 minutos se ve un vídeo que se comenta durante los siguientes 15 minutos, luego se hace un receso de 10 minutos y se continúa con una clase de 30 minutos y un nuevo periodo de análisis e intercambio de 15 minutos.
En ocasiones se puede completar las clases los sábados y domingos para realizar repasos y consolidar los conocimientos adquiridos. Es importante que estas sesiones estén acordadas con los asistentes. No se debe avanzar si lo que se ha aprendido no está debidamente consolidado. El facilitador (profesor) debe preparar la clase con antelación, relacionando la clase presencial con la del vídeo.

El módulo docente

Está constituido por la cartilla y los videos. Los videos se utilizan en los primeros 30 minutos de la clase, mientras que la cartilla, en los últimos. La cartilla, que junto al material grabado es la base del método, presenta un mismo formato en todas sus páginas. La línea directriz que sigue está sustentada en el vínculo de lo conocido, los números, con lo desconocido, las letras. Para ello se asocia a cada letra con un número y cada una de ellas constituye una clase.
La última parte de la cartilla está destinada a las combinaciones trilíteras, de tres letras o más, que requieren un tratamiento particular. Los espacios señalados con un lápiz están destinados a ser rellenados por los alumnos pero, a menudo, hace falta ampliarlos con espacio auxiliar. En el centro de la cartilla hay un espacio destinado a resumir letras o fonemas estudiados para que sirvan de ayuda al estudiante en la ejecución de los ejercicios propuestos.
La asociación entre números y letras que se ha realizado es la siguiente:
  • a se ha asociado con el número 1.
  • e se ha asociado con el número 2.
  • i se ha asociado con el número 3.
  • o se ha asociado con el número 4.
  • u se ha asociado con el número 5.
  • l se ha asociado con el número 6.
  • r (suave y fuerte) se ha asociado con el número 7.
  • f se ha asociado con el número 8.
  • m se ha asociado con el número 9.
  • c se ha asociado con el número 10.
  • p se ha asociado con el número 11.
  • t se ha asociado con el número 12.
  • v se ha asociado con el número 13.
  • s se ha asociado con el número 14.
  • n se ha asociado con el número 15.
  • rr (por una cuestión metodológica), se ha asociado con el número 16.
  • q se ha asociado con el número 17.
  • y se ha asociado con el número 18.
  • d se ha asociado con el número 19.
  • b se ha asociado con el número 20.
  • h se ha asociado con el número 21.
  • ñ se ha asociado con el número 22.
  • ch se ha asociado con el número 23.
  • j se ha asociado con el número 24.
  • x se ha asociado con el número 25.
  • ll se ha asociado con el número 26.
  • z se ha asociado con el número 27.
  • g se ha asociado con el número 28.
  • k se ha asociado con el número 29.
  • w se ha asociado con el número 30
Al concluir el programa, se le ofrece a los alumnos un mes de perfeccionamiento en la lecto-escritura, ya sin soporte audiovisual.
Existe otro programa que complementa a "Yo, sí puedo" y permite al alfabetizado llegar a completar los estudios de primaria, este es el Programa Yo, sí puedo seguir.

Reconocimientos al Programa

Ha obtenido resultados satisfactorios y en las cifras más actualizadas, existen alrededor de 5 millones de personas alfabetizadas, por los esfuerzos realizados por 28 países en el mundo.
En el Informe sobre el estudio presentado en la UNESCO en la 175ª reunión su Consejo Ejecutivo EX, se expresó:
...de que el Yo sí puedo es de hecho, algo más que un mero método de alfabetización. Sería más adecuado considerarlo como un modelo de alfabetización que no solo se reduce a una serie de procesos, materiales, estrategias, etc. sino que engloba de forma explícita e implícita el enfoque conceptual de la alfabetización , el aprendizaje, las competencias para la vida diaria y la movilización social, e implica la participación de toda una serie de protagonistas con funciones diversas, que van desde los beneficiarios de la alfabetización hasta otras personas interesadas, por ejemplo organismos estatales y otras identidades.
19, 175 EX/9.
El Programa “Yo Sí Puedo” ha sido utilizado con éxito en casi una treintena de naciones, entre ellas Venezuela y Bolivia, declaradas libres de ese flagelo en el 2005 y en 2008, respectivamente, con la asesoría de Cuba, que de manera solidaria trasmite su experiencia en la educación a varios países.
Entre los países que lo utilizan se encuentran Argentina, Venezuela, México, Ecuador, Bolivia, Nicaragua y Colombia. Con la aplicación de este sistema de enseñanza se podría alfabetizar a una persona en 7 semanas y se lograría erradicar este mal de la tierra con solo la tercera parte del fondo de la UNESCO para estos fines. En muchos países ha sido llevado a acabo por organizaciones religiosas y ONG's.
En Venezuela, donde había voluntad política y financiera y una participación activa e ilusionada de los beneficiados, se logró alfabetizar a un millón de personas en cinco meses y 27 días en las 34 lenguas y etnias que existen en el país. Con ello se declaró a Venezuela territorio libre de analfabetismo e incentivó a la continuación de los estudios a todos los que lo desearan. Se da la circunstancia que hay personas de más de 100 años de edad que han sido alfabetizadas con este método. Una de ellas declaró:
He tenido que esperar 102 años para escribir mi nombre. Ahora me puedo morir tranquila.
En México se ha utilizado, con buenos resultados, en los estados de Michoacán, Oaxaca, Veracruz y Nayarit. En este caso las grabaciones están realizadas por actores mexicanos e incluyen variaciones propias del español hablado en el país.
En África se utiliza en Nigeria, Guinea-Bissau, Mozambique, Angola y Sudáfrica. Para ello se realizan las modificaciones precisas para adaptarlo a las lenguas de los países que lo van a autorizar así como a sus condiciones históricas, geográficas y sociales.
También se está utilizando en Nueva Zelanda y en la ciudad de Sevilla como primera experiencia del programa en Europa , donde se estima la existencia de al menos 35.000 analfabetos.
Este programa recibió el Premio Alfabetización 2006 Rey Sejong de la UNESCO, otorgado al IPLAC (Instituto Pedagógico Latinoamericano y del Caribe de Cuba) por la promoción del sistema de alfabetización tan exitosamente aplicado en los países mencionados anteriormente.

Bibliografía

  • Canfux Gutiérrez, Jaime y otros. Curso Pre-Congreso “Los procesos de alfabetización y educación de jóvenes y adultos en diferentes contextos”.
Congreso Internacional Pedagogía 2011. Palacio de las Convenciones. La Habana. Cuba. 2011.
  • Relys Díaz, Leonela. “Yo, sí puedo”. Un programa para poner fin al analfabetismo. Editorial Abril. La Habana, Cuba, 2005.
  • UNESCO. Informe sobre la eficacia y viabilidad del método de alfabetización “Yo si Puedo” de conformidad con la Decisión 174 EX/44, en la 175ª reunión de su Consejo Ejecutivo EX. París. 25 de agosto de 2006

Enlaces externos

http://www.ecured.cu/index.php/Programa_cubano_de_Alfabetizaci%C3%B3n_Yo_S%C3%AD_Puedo

 

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